LA VITRINA DE LA CONVERSA

lunes, enero 20, 2025

¿Las derechas unidas, jamás serán vencidas?

Por Hernán Riaño

La esperanza está en los jóvenes comprometidos que defienden causas justas, apoyan al gobierno y denuncian la corrupción. A pesar de carecer de recursos, se esfuerzan por difundir la verdad y están motivados por el amor a su país. Gracias a su labor, se ha revelado información que los medios corporativos intentan ocultar. 

El mundo ha conocido una consigna que gritan los manifestantes en contra de la derecha para reivindicar sus derechos: ¡El pueblo unido jamás será vencido! En nuestro país, la verdadera unión se ha visto en la ultraderecha mafiosa que quiere perpetuar sus privilegios en contra de los colombianos. Ellos que, dependiendo de la época, sus necesidades y sus intereses, se “pelean” unos con otros, luego se amistan, los que ayer fueron enemigos, hoy son inseparables. Recordemos episodios como la denuncia que le hizo Andrés Pastrana al periodista de Univisión, Jorge Ramos, cuando este le preguntó si Uribe era narcotraficante; Pastrana le contesta: “es que yo lo he denunciado…” (1), o cuando, en medio de un ataque de histeria, César Gaviria gritaba en televisión, refiriéndose a Uribe: “¡Uribe mentiroso, Uribe mentiroso, Uribe mentiroso!” (2), en el lanzamiento de la campaña de reelección presidencial de Santos; hoy los vemos cogidos de la mano atacando a Gustavo Petro desde todos los flancos y usando todas las armas innobles que siempre han utilizado. 

En el congreso era igual (¿Aún lo es?), los representantes y senadores “cazaban” peleas insulsas, se gritaban, y hasta se decían groserías en las sesiones o plenarias para embobar al pueblo y, luego, después del espectáculo, los veía uno en las páginas sociales de los periódicos, compartiendo unos “amarillos”, como los mejores amigos, como si nada hubiera pasado, en cualquier evento social de la alta aristocracia criolla. Se burlaban del pueblo en su cara. A todos ellos, los unen los intereses en los dineros del Estado para usarlos en su beneficio, dejando, de paso, en la miseria a los ciudadanos; así ha sido desde que Colombia se convirtió en una “democracia”.

Hoy vemos un fenómeno no antes visto en nuestro país, es la unión total de las derechas, porque todos son eso, para “recuperar” a nuestro país, según ellos dicen. Todos los sectores, gremios, grandes empresarios, con algunas contadas excepciones, partidos políticos de los llamados tradicionales y sus divisiones y hasta partidos o movimientos llamados de centro, de centro izquierda (¿?), ambientales, grupos delincuenciales de todo tipo, “guerrilleros” y otros muy dignos, se han unido en contra del primer gobierno democrático para no dejarlo actuar y con la consigna de que todo vuelva a ser como antes, o sea dominado por ellos, a partir del año 2.026. Que mescolanza de ideologías, diría uno, pero lo que se ve, decantando todas las arandelas, es que todos son lo mismo, unos siendo los del poder y otros sirviéndoles de “idiotas útiles” o de cómplices conscientes, para que la ultraderecha vuelva al gobierno, todos enemigos reales del pueblo y al servicio del uribismo.

Tienen unos grandes difusores de sus consignas, mentiras, calumnias y amenazas, que son sus medios de comunicación, los llamados tradicionales, que hoy más que nunca y vísperas de un año electoral, han agudizado los ataques con todo tipo de armas para desestabilizar y desacreditar a Gustavo Petro, quien en este momento es el blanco de casi todos los embates con los que a diario se ensaña esta, mal llamada; “prensa” colombiana. Lo que estamos viviendo nunca lo había visto el país, por lo menos tan descaradamente; ya no disimulan, no se ocultan bajo premisas engañosas, ya alzan la voz y muestran su derechismo y posibles delitos, abiertamente, sin pena, están demostrando que la verdad les importa “un comino” y que su indudable razón de existir es la defensa de los empresarios que los tienen en esos puestos comunicativos. Lo grave es que muchos de ellos salieron con peores instintos destructores que sus patrones, no les importa atacar a mujeres, niños, minorías y últimamente a las madres de las víctimas de los mal llamados falsos positivos, de desapariciones, de operaciones de “seguridad democrática, o de masacres, revictimizándolas sin ninguna consideración y por encima de cualquier sentido de humanidad. 

Unos y otros, se dedicaron a tapar, minimizar o desviar la atención de todos los actos de corrupción, desfalcos, robos y quién sabe qué otros delitos cometidos por gobiernos anteriores y que dejaron al país con unas deudas inmensas que le ha tocado afrontar al gobierno actual. Son tan cínicos que ahora resulta que la situación que encontró Petro es culpa de Petro. Tamaño despropósito que aún creen los estúpidos que aún los siguen a ojo cerrado. Presentan cualquier incoherencia seguros de que su audiencia de idiotas les cree y que como “loros” salen a repetir, orgullosos de su uribismo e ignorancia.

Están unidos férreamente, como un solo hombre para atacar al progresismo, para evitar que siga en el poder, para impedir que se siga conociendo todo lo que ellos han hecho para enriquecerse con el erario o con los negocios ilícitos a los que han estado acostumbrados por tantos años. Sí, descaradamente unidos, ya no disimulan, son una sola cosa, un solo interés, con un desprecio total por el ciudadano, que hace recordar las cortes de nobles europeas antes de la revolución francesa, cuando el pueblo era mantenido en la miseria absoluta, mientras los señores feudales eran dueños de todas las tierras y se quedaban con todas las riquezas. Lo más grave es que lo hacen sin argumentos, ni inteligencia, ni conocimiento, ellos actúan con violencia, solo por amor al poder y al dinero. Hoy no les importa la opinión de la ciudadanía, solo lo que ellos digan y quieran hacerle al país. Lo hacen porque están seguros que el pueblo no reaccionará, saben que los tienen amaestrados, domesticados, esclavizados, avasallados para que les diga que sí a todo lo que quieran. 

Es preocupante que, ante la gran cantidad de denuncias de corrupción y desfalco, los colombianos no actúen, no protesten, es como si todo lo que han hacho hubiera pasado en otro país, en otra dimensión o en otra galaxia, es como si no fuera con ellos, como si el dinero que se embolsillan no saliera de los impuestos que ellos pagan, no les importa quedarse sin salud, educación vivienda o cualquier otro derecho. No, no les afecta, quieren seguir viviendo así. Es muy alarmante lo que vemos a diario. Tampoco actúan, ni les exigen cuentas a congresistas, diputados, concejales y ediles por los que depositaron su voto y ya estando en los cuerpos legislativos, los traicionaron, les mintieron o los engañaron. Muchos de estos “padres de la patria o aspirantes a serlo, hacen todo lo contrario a lo que prometieron abiertamente, sin tapujos y ningún elector les dice “ni mu”. 

Mientras todo esto está sucediendo, muchos sectores de la izquierda o el progresismo no han resuelto aún el dilema si primero fue el huevo o la gallina. No actúan, se la pasan sentados en una cafetería, en las redes sociales, o en charlas eternas, viendo a ver en qué se equivocó Petro, qué incumplió, según ellos, para “darle duro”, porque se creen con la verdad revelada. Están seguros de ser los únicos que sí saben cómo se resuelven los problemas nacionales, pero solo hablan, no hacen nada y su activismo se reduce solo criticar, mientras que la ultraderecha está unida y actuando en contra de la democracia. 

La esperanza, repito lo escrito en otras columnas, está en los jóvenes que sí saben lo que quieren y conocen como hacerlo o por lo menos lo intentan, esos que apoyan al gobierno, que defienden a las madres de las víctimas, que denuncian la corrupción, los robos y los desfalcos, que, a pesar de no tener medios, se los inventan sin esperar nada a cambio, sin ponerle condiciones al gobierno, están comprometidos en difundir la verdad y solo por amor al país. A ellos les debemos mucho de lo que se ha sabido, la difusión de las noticias que tratan de tapar los medios corporativos y que cuando hay que salir a apoyar lo hacen conscientes de lo que le espera al país si regresa la barbarie, los asesinatos, los mal llamados falsos positivos, las desapariciones y todo lo que el país ha conocido, pero se resiste a aceptar.

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https://youtu.be/9j6g0rdwhtQ?si=SB2p_eS3vmj1Nrzq

Las opiniones de los columnistas son de su exclusiva responsabilidad.  Les invitamos a leer, comentar, compartir y a debatir con respeto.

Esta nota fue publicada originalmente en SoNoticias y es compartida con la comunidad de La Conversa de Fin de Semana, gracias a la generosidad del periodista Hernán Riaño

domingo, enero 19, 2025

A Colombia la está matando la (falta de) pereza


Imagen tomada de: https://www.instagram.com/tips.empresariales/

La pereza es la chispa oculta de la motivación.

En un mundo obsesionado con la productividad, reivindicar la pereza puede sonar a blasfemia. Pero, aunque sea polémico, me parece clave afirmarlo: la pereza no solo es necesaria, sino que es la chispa oculta de la innovación. Mientras el culto a la disciplina nos arrastra por horarios estrictos y rutinas repetitivas, es en esos momentos de "hacer nada" donde realmente se gesta el futuro. 

En Colombia, el culto a la explotación laboral ha alcanzado niveles alarmantes. Aquí, trabajar horas extra sin compensación no es visto como un abuso, sino como una medalla de honor. Se glorifica el "echarle ganas" sin importar los costos personales, y cuestionar esta dinámica es casi un acto de traición. En relación a ello, las tasas de burnout y enfermedades mentales cada vez son más altas en el país. 

Pensemos en el plano personal. Cuando nos permitimos descansar, divagar o simplemente procrastinar con estilo, algo curioso sucede: nuestro cerebro empieza a conectar puntos que parecían inconexos. Aprender algo nuevo, leer por placer o incluso ver memes no es una pérdida de tiempo; es una inversión en creatividad. Las grandes ideas no surgen en maratones de trabajo sin fin, sino en esos momentos de ocio en los que la mente divaga libremente. Desconectarse es una forma de recargarse. 

En el ámbito organizativo, la historia no es muy diferente. Empresas atrapadas en la trampa de la "productividad" terminan optimizando lo ineficiente: más reuniones, más KPIs, más burnout. En cambio, aquellas que valoran los espacios para la experimentación y el aprendizaje fuera de las tareas rutinarias generan verdadera innovación. La rigidez y la repetición matan la creatividad, mientras que el tiempo disponible para explorar caminos nuevos permite optimizar procesos y encontrar soluciones frescas. 

Esta misma lógica aplica al sector público, donde la innovación es urgente pero frecuentemente asfixiada por la burocracia y la repetición de prácticas obsoletas. Crear espacios para el pensamiento libre y el aprendizaje fuera de las estructuras tradicionales podría ser la clave para resolver problemas de políticas públicas con soluciones novedosas y eficientes. Sin tiempo para pensar de forma creativa, las instituciones públicas corren el riesgo de perpetuar sistemas ineficientes en lugar de transformarlos. 

Así que, si aún dudas del poder de la pereza, mira a tu alrededor. ¿Cuántas veces una idea brillante ha surgido en una reunión programada? Probablemente menos de las que han nacido en una caminata sin rumbo o una conversación aparentemente trivial. La innovación no responde a horarios; responde a la libertad de pensar sin presión. 

Reivindicar la pereza no significa abdicar de la responsabilidad, sino entender que el tiempo no estructurado tiene un valor incalculable. Lejos de ser el villano que la narrativa productivista nos ha vendido, la pereza es la heroína silenciosa que nos permite optimizar lo que hacemos y cómo lo hacemos. Así que, la próxima vez que alguien te acuse de holgazanear, simplemente sonríe: podrías estar cocinando la próxima gran idea que cambiará el mundo. 

Las opiniones de los columnistas son de su exclusiva responsabilidad.  Les invitamos a leer, comentar, compartir y a debatir con respeto.

*Columnista invitado: Consultor, análisis y visualización de datos y uso de IA 
 

miércoles, enero 08, 2025

El mundo está hecho un sancocho de locos

Por: Germán Navas Talero y Pablo Ceballos Navas

Editor: Francisco Cristancho R.

Al frente de una guerra que nos hace temer por el regreso de la confrontación global está un ex-payaso que funge como dictador, como quiera que; permanece en el cargo aún vencido su periodo constitucional, y quien goza del apoyo decidido e irrevocable de varias potencias mundiales. De un bufón depende si continúa la guerra en Europa. 

La salud mental del planeta inquieta y preocupa. En Nueva Orleans un hombre en quiebra y sin esperanzas empleó un par de anteojos ‘inteligentes’, creados por una gigante tecnológica, para grabar el recorrido que luego haría a bordo de una pickup con la que arrolló a decenas de transeúntes y asesinó a catorce personas. A unas horas de vuelo, en el norte de Alemania, otro hombre ejecutó conducta similar en un mercado navideño, forzando al recuerdo de los peores momentos del terrorismo islamista en Europa. Y a escasos kilómetros de donde estamos, en San Vicente de Chucurí y en Garagoa, hay individuos que deciden abandonar una vida bucólica en el pueblo para luchar una guerra ajena en Ucrania, llevando consigo las mañas o ‘malas prácticas’ que derivaron en ejecuciones extrajudiciales, pactos ilegales y toda suerte de abusos de poder protagonizados por la fuerza pública durante el conflicto armado interno.

Debe ser objeto de indagación por nuestras autoridades que haya alrededor de doscientos nacionales colombianos prestando servicios ‘militares’ en Ucrania, que incluyen, entre otros, el homicidio (de militantes contrarios y, con o sin intención, probablemente también de civiles), el desplazamiento de la población local y el uso de armamento de guerra avanzado sin mayor –por no decir ningún– control.

En un artículo publicado por El Espectador, firmado por G. Jaramillo Rojas y que dicho sea de paso está muy bien escrito, se relata la experiencia de “Chucurí” en la guerra rusoucraniana, que bien puede resumir la de los demás “legionarios”: la necesidad en casa, la promesa de una paga relativamente buena, una convicción espuria de servir a un bien mayor –siempre que el cheque hiciera canje–, una decepción, el engaño y el retorno. A juzgar por los testimonios de este y otros entrevistados, Zelenski no solo es un payaso, sino también un trapacero mala paga.

Aunque uno pueda compadecerse de los connacionales por la trampa o por el trauma que seguramente produjo en ellos la experiencia del combate, queda uno con la pregunta de cómo es posible que un colombiano –quien al igual que nosotros ha podido conocer y constatar desde la infancia los efectos de la guerra– no esté prevenido de lo que vendrá cuando se inscribe como “legionario” para batallar contra una potencia armamentista. ¿Qué esperaban que les ocurriera? ¿Pensaron que les concederían tratamiento de dignatarios extranjeros, como sugiere la publicidad del gobierno ucraniano? Pues claro que no, los ucranianos pagaron por un servicio y se aseguraron de que su contratista prestara este a satisfacción, sin ninguna otra consideración.

Volviendo a estas latitudes, coincidimos con la opinión de la doctora Diana Guzmán, directora de Dejusticia, quien en entrevista con El Espectador sostuvo que en medio de la pugna entre las altas cortes (a nuestro juicio los impulsores de la controversia) y el presidente de la República cayó la elección de procurador, en la que “prevaleció la idea de ‘hay que ganarle al presidente’”, hecho que califica de “malo y negativo para las propias cortes, pues para que puedan funcionar bien tienen que estar abiertas al escrutinio público”. Agregó que esta labor también le corresponde al presidente y en ello las cortes también desempeñan “un papel muy importante”.

En nuestro concepto, la plana mayor del poder judicial se ha equivocado de cabo a rabo: ante un ejercicio ciertamente precario de su labor en los últimos años, los presidentes de las altas cortes decidieron participar en política –aunque haya quienes crean que un magistrado polemizando con el presidente a través de la prensa es una muestra de “independencia judicial”– y con el peor tino, pues es este uno de los gobiernos más cercanos a su causa. Prueba de ello la sanción de la reforma a la ley estatutaria de administración de justicia, por medio de la cual se concedió una reserva presupuestal –ajena a cualquier contingencia– del tres por ciento (3%) del presupuesto nacional para los gastos de funcionamiento e inversión de la Rama Judicial, librándolos de la penosa y nada sencilla petición de más dinero para cubrir faltantes, año tras año.

Veremos si el cambio de liderazgo en las altas cortes traerá consigo figuras menos obstinadas, más dialogantes, que tengan el conocimiento y la voluntad para hacer cumplir el mandato de colaboración armónica que impone la Constitución.

Gracias por continuar leyéndonos.

Las opiniones de los columnistas son de su exclusiva responsabilidad.  Les invitamos a leer, comentar, compartir y a debatir con respeto.

Esta nota fue publicada originalmente en SoNoticias y es compartida con la comunidad de La Conversa de Fin de Semana, gracias a la generosidad del periodista Hernán Riaño.

jueves, enero 02, 2025

Un saboteo económico a toda marcha*

 

Por:  Consuelo Ahumada 

El atentado contra el manejo de las finanzas públicas es clarísimo, precisamente cuando se acerca el período electoral

*Teniendo en cuenta que, como consecuencia del sabotaje económico perpetrado por la oposición de derecha, a las propuestas económicas del gobierno nacional de Colombia, éste obligatoriamente tendrá que hacer importantes recortes presupuestales que afectarán intereses como los de las EPS y, ante la intensificación de la campaña de desinformación y manipulación ejecutada por la prensa tradicional colombiana; estimamos conveniente compartir con la comunidad de La Conversa de Fin de Semana, esta nota publicada originalmente en SoNoticias.

El año que está por terminar ha sido el más difícil para el gobierno del Cambio. Una oposición enardecida y apuntalada por sus poderosos voceros mediáticos no ha escatimado esfuerzo para destruirlo y difamarlo, tratando así de desmoralizar a las mayorías populares que lo eligieron.

Algunos sectores le siguen apostando a sacarlo de la presidencia a como dé lugar. Ya veremos qué pasará con el arranque en firme de Trump.

El frente económico ha sido especialmente duro. De hecho, la lucha por la apropiación y destinación de los recursos públicos es la disputa fundamental en todas sus reformas estratégicas. La vieja oligarquía y los neoliberales, dueños y señores de la tierra y de los negocios, se resisten a ceder parte de sus privilegios para permitir que se sienten las bases de la transformación social.  

Los economistas adocenados, algunos llenos de títulos, varios de ellos exministros/as, se pronuncian contra el caos, le auguran los peores desastres. Lo responsabilizan de todo y todo lo cuestionan. A falta de argumentos, vienen los adjetivos, los insultos.

Para nada importa que, de acuerdo con la revista The Economist a la que tanto invocan, Colombia fuera catalogada como la sexta mejor economía entre los 37 países de la OCDE en 2024.

Pero entremos en materia. Hace dos semanas, pocos días antes de finalizar las sesiones del Congreso, la estrategia financiera del gobierno recibió un durísimo golpe.

Las comisiones económicas de Senado y Cámara archivaron, sin siquiera discutirlo, su proyecto de ley de financiamiento. Meses antes, en un hecho insólito, el Congreso se había negado a la discusión y aprobación del Proyecto de Presupuesto Nacional (PPN) de 2025, presentado inicialmente por $523 billones de pesos.

Durante los últimos meses, la comisión interparlamentaria de crédito público se negó a sesionar para facilitarle al gobierno el manejo de la deuda.

Durante el período de gobierno, la Junta Directiva del Emisor se ha resistido a bajar las tasas de interés al mismo ritmo de la caída de la inflación, para propiciar la reactivación económica.

Ante la reciente decisión de las comisiones económicas del Congreso, el presidente señaló con precisión: “Pudiendo evitarlo, la oposición nos lleva al default, solo para ver si perdemos las elecciones del 2026. No les importa el bienestar de la gente”. Un golpe profundo a la economía nacional y al pueblo, agregó.

La imagen de la eufórica celebración de los congresistas responsables de su hundimiento parece sacada de la afamada película de Buñuel, “El discreto encanto de la burguesía”.

Miguel Uribe, senador y precandidato de la ultraderecha, nieto del tristemente célebre expresidente Turbay Ayala, admirador de Bukele y autor de la ponencia de archivo, expresó en medio del delirio: “Lo logramos, tumbamos la ley de financiamiento salvamos los bolsillos de los colombianos”.

Cuánto cinismo y falsedad. Como lo señala Planeación Nacional, el presupuesto presentado para 2025 refleja los compromisos del Plan de Desarrollo, construido por primera vez con amplia participación comunitaria y territorial.

El atentado contra el manejo de las finanzas públicas es clarísimo, precisamente se acerca el período electoral. Petro sabe que para darle continuidad a su proyecto político requiere los recursos para concretar las reformas. Pero hay una apuesta clara de la oposición por su fracaso y por el retorno de la ultraderecha.

La Corte Constitucional “descuartizó”, como señaló Petro, la reforma tributaria aprobada dos años atrás. Una reforma en contravía de las recetas neoliberales, ejemplo para todo el continente. “Le quitaron precisamente la progresividad que ordena la Constitución al quitarle 6 billones anuales en impuestos que debían pagar petroleras y carboneras”, señaló.

No puede haber duda, entonces, del saboteo institucional, del “golpe parlamentario”.  

La presentación simultánea del PGN y de una Ley de financiamiento también la hicieron los mandatarios anteriores. Pero como se trata de Petro, la consigna era bloquearlo.

El artículo 347 de la Constitución faculta al Gobierno a tramitar una ley de este tipo cuando los ingresos previstos no sean suficientes para atender los gastos mínimos que el Estado requiere para mejorar las condiciones de vida de la población.

Al mismo tiempo, le apunta a la sostenibilidad de las finanzas públicas, con la Regla fiscal. Una imposición neocolonial, a rajatabla y sin contemplaciones, del FMI, agreguemos.

Debido a las restricciones macroeconómicas y fiscales, resultantes de deudas heredadas de gobiernos anteriores, en especial el de Duque, debió presentarse una ley de financiamiento para garantizar las inversiones fundamentales.

Recordemos que el PGN contempla tres rubros: funcionamiento, deuda externa e inversión. Los dos primeros son bastante inflexibles, por lo que la inversión social es el rubro más afectado.

Se trataba de proveer recursos de inversión para 26 sectores estratégicos para las personas más pobres: economía popular y créditos asociados, mejoramiento de vivienda, acueductos, educación pública, desarrollo de energías renovables, subsidio a los servicios públicos, en particular las tarifas de energía.

Se contemplaba también la reactivación del sector agrario, exenciones del IVA al turismo en municipios de menos de 200,000 habitantes, la reducción de impuestos a los industriales. Todo con miras a la reactivación económica.  

Se proponía impuesto para grandes patrimonios, para el poderosísimo sector de las apuestas y juegos de azar.

Señaló el presidente: "Hundieron una ley de financiamiento que bajaba las tarifas al pueblo, que estimulaba las energías limpias. Traicionaron al empresariado que dicen defender. Maldito el parlamentario que, a través de las leyes, destruye la prosperidad de su propio pueblo". 

Por último, señaló: “La crisis presupuestal no la pagará el pueblo. El recorte no se hará de manera alguna sobre los programas centrales del gobierno. Quienes pensaban desfinanciar los programas centrales de la justicia social que ya ha sacado millones de personas de la pobreza y el hambre, fracasaron”.

PS: Cuando esto escribo, no se conoce todavía el incremento del salario mínimo. Por el bien de los trabajadores y trabajadoras y de la reactivación económica, debería acercarse al porcentaje planteado por las centrales obreras. El de México es un buen precedente.   

A mis fieles lectores y lectoras les deseo felices fiestas y que 2026 les traiga muchas satisfacciones, personales y colectivas.

jueves, diciembre 26, 2024

Popurrí de fin de año


Por: Germán Navas Talero y Pablo Ceballos Navas

Editor: Francisco Cristancho R.

Indignación nos produce el silencio del alcalde de Medellín y del gobernador de Antioquia luego del descubrimiento de los restos de tres desaparecidos en territorio de su jurisdicción, mientras que solo asco suscita las declaraciones del expresidente Uribe

A los colombianos nos tienen mal acostumbrados: aquí hay quienes legitiman destruir los ecosistemas; desviar los cauces de agua hasta secarlos; matar tantos animales como sea posible y, en general, hacer prevalecer la voluntad humana a riesgo de acabar con todo. Por ello nos sorprende que exista un lugar sobre la tierra en el que exista un consenso respecto del valor de la naturaleza y su estrecha dependencia con la existencia humana. Ese lugar está en las Islas Galápagos.

Como la actualidad no da espera, incluso en época navideña, vemos con preocupación el avance de los denominados ‘europillos’. Si no han escuchado de ellos, aquí les contamos: corresponde al calificativo dado por un periodista a algunos líderes de origen europeo que, según él, estarían imposibilitando cualquier acuerdo para el cese o la terminación del conflicto entre Ucrania y Rusia. Resulta que no son pocos ni carecen de influencia, por el contrario, son actores de la mayor relevancia e incidencia. Y ni qué decir de Zelensky, el sujeto a quien por azar –e infortunio de sus conciudadanos– le tocó afrontar la guerra con su bagaje de payaso y comediante de televisión, oficios en los que ha podido ahondar durante el ejercicio del cargo como presidente.

Aunque a nosotros nos cause grima, solo podemos imaginar lo que debe provocar en un gringo esta guerra sin sentido, que se lucha a miles de kilómetros de su país, pero se financia con los impuestos que debe sufragar sin lugar al disenso. Es por ello que a nosotros no nos resulta extraño ni improcedente el reclamo de miles de estadounidenses al presidente electo, quien además coincide con ellos: es momento de terminar el conflicto ruso ucraniano o al menos de cesar la intervención de actores distintos a las naciones en contienda.

De vuelta a nuestro país, sensaciones y emociones contrapuestas nos suscita el descubrimiento de cuerpos en La Escombrera. Por una parte, nos llena de alegría y satisfacción que, gracias a la labor de las instituciones pertenecientes al Sistema de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición (SIVJRNR), hoy concluya la incertidumbre de quienes buscaban a sus allegados. Dolor nos causa que sus restos estuvieron siempre allí, en ese pedazo de montaña situado en una de las principales ciudades del país, y que yacieron durante años, incluso tras las denuncias de líderes como Piedad Córdoba y el Movice, que datan de 2010, quienes advirtieron e insistieron en que ese lugar había servido como fosa común para los grupos paramilitares y las fuerzas de seguridad del Estado.

Indignación nos produce el silencio del alcalde de Medellín y del gobernador de Antioquia luego del descubrimiento de los restos de tres desaparecidos en territorio de su jurisdicción, mientras que solo asco suscita las declaraciones del expresidente Uribe, para quien este triunfo del SIVJRNR –y la victoria para la humanidad que trae consigo– es otra oportunidad para tachar de ilegítima y politizada a la JEP. Y, por último, impera entre los involucrados en la búsqueda el sentimiento de inquietud, pues es probable que las estimaciones sobre el número de cuerpos que esperan ser encontrados allí sea menor a la realidad y por tanto se precisen mayores recursos –y más tiempo– para el reencuentro de estos restos con la humanidad de la que fueron despojados. En el entretanto, deseamos extender nuestro respaldo y admiración a quienes dedican su tiempo, experticia y energía en esta labor que nos enaltece como nación y con la cual nos acercamos –aunque tímidamente– a la verdad sobre la Operación Orión y otras empresas criminales que el Estado desplegó o consintió en la ciudad de Medellín.

Siendo esta la última columna del año, aprovechamos para agradecerles por su tiempo y fidelidad, y deseamos para ustedes y sus familias una buena Navidad, y el mejor año por venir. ¡Felices fiestas!

Adenda: en una nota alegre, Germán estuvo en un sitio encantador que desea todos tengan la fortuna de visitar: se trata del Parque Nacional Galápagos ubicado en el archipiélago homónimo, un oasis de tranquilidad en el que prevalece el bienestar de los animales y se asegura un equilibrio entre las actividades económicas y el ecosistema privilegiado en que aquellas tienen origen. Destaca en particular la calidad de los proveedores de servicios turísticos, quienes reconocen que deben ser cuidadosos con la experiencia de cada visitante, en una expresión de cuidado al turista, opuesta a la de los cocheros cartageneros o los vendedores de El Rodadero (por mencionar algunos de los tantos ejemplos que nosotros y ustedes conocemos). En las Galápagos usted es casi tan sagrado como las legendarias tortugas gigantes, así que si está dentro de sus posibilidades e intereses considere visitar este paraíso en la tierra.

¡Hasta la próxima!

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Esta nota fue publicada originalmente en SoNoticias y es compartida a la comunidad de La Conversa de Fin de Semana, gracias a la generosidad del periodista Hernán Riaño.

jueves, diciembre 19, 2024

En Colombia la sal se corrompió

 

Por: Hernán Riaño

La frase "la realidad supera la ficción" es pertinente en el contexto actual de Colombia, donde un magistrado recién elegido ha optado por no posesionarse ante el presidente de la república; una situación preocupante, especialmente considerando los rumores sobre posibles intentos de golpe de Estado contra el gobierno nacional de Gustavo Petro.

En diciembre de 2.023, escribí una columna titulada “Cuando la sal se corrompe”, llamando la atención sobre las actuaciones de las mal llamadas “altas” cortes, que de altas no tienen nada, porque perdieron toda su dignidad, imparcialidad y defensa de la Constitución y las leyes como es su obligación (1).

Hace un año, sus decisiones en contra del pueblo y solo contra pueblo, las tomaron hacerle daño al primer gobierno democrático de nuestro país, dejaron ver como estas cortes fueron cooptadas por Álvaro Uribe Vélez y la ultraderecha colombiana para garantizar que los postulados neoliberales mafiosos tuvieran una continuidad en el tiempo y que los ciudadanos no pudieran acceder a los derechos constitucionales y humanos. Eso se vio, para dar un solo ejemplo, con la derogación de los decretos de emergencia para la Guajira, que solo pretendían llevarle agua y alimentos a una de las regiones más golpeadas por la corrupción y el despojo de los dineros públicos que debieran ser dedicados al bienestar de los habitantes de esa región ancestral. Otras decisiones que perjudicaron ampliamente la recuperación del país fueron viéndose a lo largo de estos más de dos años del gobierno Petro.

Pero lo visto en estos últimos días pareciera mentira, por eso el dicho de que la realidad supera la ficción viene como anillo al dedo en esta coyuntura. Que un “magistrado” recién elegido decida no posesionarse ante el primer mandatario de la república y que el presidente avale y justifique dicha acción es muy delicado (2), con la situación actual del país y los rumores o ¿acciones? de golpe de Estado en contra del señor presidente de la república, que se están ventilando en Colombia. Que el mismo presidente de la corte suprema de justicia, supuestamente, oculte su declaración de renta además de muchos otros actos bochornosos, son hechos muy delicados por las consecuencias que puedan tener en una sociedad débil, democráticamente hablando, como la nuestra (3). Porque ellos deben ser el ejemplo de pulcritud, transparencia e independencia de todos los colombianos, ellos son los que marcan el ejemplo de decencia para que los demás ciudadanos no justifiquen actos similares diciendo: “¿si eso lo hizo el presidente de la corte, por qué yo no puedo?” degradando aún más la frágil convivencia que aún podamos tener.

Lo grave del hecho es que las cortes están en una guerra silenciosa contra el pueblo colombiano, que personifican en Gustavo Petro, obedeciendo el mandato de los partidos de ultraderecha y el “innombrable” para bloquear cualquier acción del gobierno del cambio en contra de los colombianos, que redundaría en una pérdida de popularidad del presidente y facilitaría el tan anhelado golpe blando que tanto quieren para volverse a lucrar de los dineros de los impuestos que han usufructuado por tanto tiempo y que Petro ha denunciado a lo largo de su vida pública (4). Se dedicaron a hacer política en favor de la ultraderecha, ese es un hecho irrefutable, pero lo que deberían hacer es administrar justicia, que es la garantía de la democracia. No quisieron recibir una condecoración para la corte suprema por sus valerosas actuaciones en la lucha narco paramilitar, aduciendo que se estaba violando la independencia judicial. Además de todo, faltos de inteligencia, ya que la condecoración no era para ellos como personas sino a la institución por sus actuaciones del pasado en contra del narcotráfico y el paramilitarismo, pelaron el cobre, como se dice popularmente (5).  

Otro hecho que se vio el día 12 del presente mes y en una acción sorpresiva, aleve y traicionera, el congreso decidió hundir la llamada ley de financiamiento que propuso el ejecutivo para garantizar los dineros necesarios para el funcionamiento del Estado durante el 2.025, con una propuesta de archivo del senador ultra uribista-derechista, el delfín Miguel Uribe Turbay, solo para desfinanciar al gobierno y que no pueda cumplir con todas las metas sociales. Lo celebraron con un descaro inusitado, como si hubieran logrado un trofeo mundial, lo que realmente hicieron fue negar subsidios a los más pobres, rebaja de impuestos a las medianas y pequeñas empresas, la posibilidad de recuperar impuestos atrasados y que estos empresarios se pusieran al día, atacar el sector turístico al no aprobar exenciones para el sector y para las energías limpias (6). Este proyecto de ley tuvo que proponérsele al congreso ya que la corte constitucional “tumbó” parte de la reforma tributaria anterior, incluido el artículo que pretendía cobrarles impuestos a las multinacionales minero-energéticas (7). Muchos dicen, incluyendo al presidente, que la tumbaron para golpear a Petro, pero a quienes realmente perjudicó fue a los pobres de Colombia. Lo que más aterra es que ¡la tumbaron sin leerla!, ya lo habían anunciado los de los partidos de la oposición incluyendo a Efraín Cepeda, presidente del Senado, que dijo, que no iban a permitir la aprobación de las reformas, demostrando su alto grado de ignorancia y sus intereses oscuros en contra del gobierno. 

Parlamentarios traidores que se hicieron elegir con las banderas de reivindicación de los derechos de los colombianos, unidos con los de la ultraderecha, no solo votaron para el hundimiento de la ley de financiamiento, sino que han demandado leyes sociales ya aprobadas, se oponen a las reformas, no hacen quórum, no trabajan, solo gritan y ofenden a todo el que se atreva a cuestionarlo; dejan un panorama muy triste de la calidad de las personas por quienes votaron colombianos, muchos vendiendo sus votos u obedeciendo a sus patrones, costumbre causada por el neofeudalismo que impera en el país desde la colonia española o por simple odio a Petro. Este congreso, salvo las excepciones muy honrosas de la mayoría de los parlamentarios de gobierno, aunque no la totalidad, es otro ingrediente para demostrar el odio a los pobres que les tienen las élites que mantienen el poder  y que no quieren que el progresismo continúe por la senda de recuperación económica de Colombia después de la debacle de los “narcogobiernos” incluido el de Cesar Gaviria, que sumieron a Colombia en la miseria y que el señor presidente Gustavo Petro está tratando de sacar por todos los medios.

Se une la procuraduría, en manos de Margarita Cabello Blanco que, con sus acciones durante el gobierno actual y a escaso un mes de dejar la entidad, ha hecho todo lo posible por bloquear desde ese ente administrativo de control a los funcionarios que hacen su trabajo, cumplen con su función y además denuncian las barbaridades en materia económica, social y de derechos humanos cometidas por esos mismos sectores de las derechas colombianas. 

La elección de Álvaro Hernán Prada como presidente del CNE, ante una renuncia de Lourduy, es otro hecho relevante, ya que Prada, quien está siendo juzgado por supuesta compra de testigos, es enemigo declarado de Gustavo Petro y fue ponente de la proposición de investigación al señor presidente de la república, por mentirosas acusaciones del mismo Prada.

Como podemos concluir, ya no les da pena demostrar quienes son y de qué lado están, no disimulan sus verdaderas intenciones de acabar con este gobierno, de seguir esquilmando el erario y, una cosa muy importante, evitar que se sigan destapando todos los robos, los asesinatos, los mal llamados falsos positivos y en general todos los delitos en que ha incurrido la ultraderecha colombiana.

La conclusión de este episodio reciente, y que parece ya colmó la paciencia de muchos colombianos, es que como se dice popularmente la “pelota paso al campo” del pueblo. ¿Qué harán los colombianos ante tanta afrenta e irrespeto a su dignidad? Esperemos a ver qué acción toman, sobre todo los jóvenes quienes son los que, tristemente, deben luchar por su futuro. De no defender su gobierno, muy trágico será su futuro y el de sus hijos, como lo sentenció hace muchos años Jaime Garzón.    

Las opiniones de los columnistas son de su exclusiva responsabilidad.  Les invitamos a leer, comentar, compartir y a debatir con respeto.

Esta columna fue publicada originalmente en SoNoticias y compartida con la comunidad de La Conversa de Fin de Semana, gracias a la generosidad del periodista Hernán Riaño


(1) https://sonoticias0.wordpress.com/2023/12/15/cuando-la-sal-se-corrompe/

(2) https://www.asuntoslegales.com.co/actualidad/ose-urbano-martinez-toma-posesion-como-magistrado-corte-suprema-de-justicia-4014646

(3) https://www.youtube.com/watch?v=ii-EVkEBZAY https://x.com/JuanPoe/status/1866559256490627583

(4) https://www.facebook.com/share/p/15ghn1Y4to/

(5) https://www.youtube.com/live/kKsJtCg19e4

(6) https://x.com/derlilopeza/status/1867052012044726413

(7) https://www.eldiario.com.co/noticias/colombia/corte-constitucional-tumbo-impuesto-de-regalias-a-petroleras-y-mineras/  https://www.sur.org.co/polemico-fallo-de-la-corte-constitucional-deroga-la-prohibicion-de-deducir-regalias-en-el-impuesto-de-renta/ https://x.com/petrogustavo/status/1867208361923535296?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed%7Ctwterm%5E1867208361923535296%7Ctwgr%5E753b4e371788a8009dd061632efda83f356e8b3c%7Ctwcon%5Es1_&ref_url=https%3A%2F%2Fwww.vocescolombia.com%2Fpetro-reacciona-al-hundimiento-de-la-ley-de-financiamiento-anuncia-ajustes-tributarios-y-promete-proteger-programas-sociales%2F