LICENCIA
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LA VITRINA DE LA CONVERSA
jueves, octubre 06, 2022
LAS TRAMPAS DEL SEPARATISMO
lunes, octubre 03, 2022
domingo, septiembre 25, 2022
martes, septiembre 20, 2022
SIMPLEMENTE PARAMILITARISMO
“La primera víctima fue Eduardo Novoa. Le mocharon una oreja y le pusieron una bolsa en la cabeza. Después lo pelaron con espino. Gritaba que no lo mataran, le pegaban patadas y puñetazos, toda la cara se la partieron y nos decían: Miren, para que aprendan y vean lo que les va a pasar a ustedes. Luego lo tiraron a la cancha y le dispararon se demoró en morir”. Estos hechos ocurrieron en febrero de 2000. (INDEPAZ, 2009)[1]
Tal y como lo afirma la Comisión Colombiana de Juristas[2] en su texto titulado: Organizaciones sucesoras del paramilitarismo: “se puede empezar por afirmar que el paramilitarismo, en cuanto fenómeno social no desapareció de la sociedad colombiana con la desmovilización”, de hecho, la constatación de su permanencia ha sido evidenciada con asombrosa asiduidad por parte de las organizaciones defensoras de derechos humanos, nacionales e internacionales. Esta presencia, de conveniente bajo perfil, ha sido denunciada por comunidades a atemorizadas por su presencia alrededor de la minería ilegal, sus amenazas en contra del liderazgo social y la reivindicación de muchos asesinatos y masacres a lo largo y ancho del país, en los últimos años.
Imagen tomada perfil Twitter de Carlos Caicedo |
La presencia de estas camionetas blancas de alta gama, dizque para, hacer una protesta pacífica, también trae a la memoria, la misma protesta pacífica que llevaron a cabo algunos ciudadanos del sur de Cali...
Sin embargo, lo realmente preocupante, es la permanencia del fenómeno social de aceptación de su existencia, como una “supuesta necesidad” de seguridad, habida cuenta de la incapacidad demostrada de los gobiernos locales para enfrentar un fenómeno económico-militar que supera enormemente, su muy reducida capacidad de inteligencia militar y de recursos logísticos. De igual manera, la consumada política pública del gobierno uribista de Iván Duque, consistente en “Hacer trizas la Paz”, acabó por reforzar la justificación social del paramilitarismo.
Se puede afirmar entonces, que no es coincidencia el
súbito interés de la llamada gran prensa colombiana, de dar cubrimiento
exhaustivo a las notas sobre delincuencia que azotan a las ciudades y campos,
alegando que tal despliegue informativo, obedece a un muy discutible incremento
de la violencia y a las quejas de inseguridad que expresa la ciudadanía.
Valdría la pena revisar minuciosamente las cifras, puesto que algunas de ellas,
vienen señalando una disminución de los actos delictivos, tras el anuncio del gobierno
del Pacto Histórico de la pronta implementación de su política pública de Paz
Total, datos muy contrarios, a las alegadas estadísticas de los medios de
comunicación, hábilmente utilizadas como sustento de la percepción de
inseguridad, que la prensa en oposición esgrime como justificación para un
retorno a la mano dura de la Seguridad Democrática.
Así mismo, las recientes declaraciones de José Félix LaFourie,
líder del gremio ganadero de Colombia, de su esposa, la senadora uribista María
Fernanda Cabal y de otras autodenominadas personas de bien, en torno a la
organización de grupos de ciudadanos para defender el derecho a la propiedad
privada y a prevenir el supuesto fenómeno masivo de la invasión de tierras; señalan
la persistencia, al interior de un sector de la población, identificada
ideológicamente con la derecha, de una estrategia para “ legitimar, justificar y defender
tanto el paramilitarismo, como las relaciones de las fuerzas armadas con éste,
pasando por el narcotráfico y la ola de crímenes en nombre de una cruzada
anticomunista” ( Velásquez, 2007)[3].
La sola
posibilidad de una re edición de las oscuras noches de terror paramilitar,
deberían bastar para que la sociedad colombiana, se hubiera alzado en enérgico
rechazo a las imágenes de hacendados reunidos en intimidantes caravanas de
camionetas blancas de alta gama, con la presunta anuencia de autoridades
civiles y militares del Plato, departamento de Magdalena, haciendo control
territorial, desplazando, o mejor, suplantando a esas autoridades,
constitucionalmente obligadas a hacerlo, y que sin embargo, parecieran haber
preferido prevaricar, antes que exponerse al poder de estas gentes de bien.
La
presencia de estas camionetas blancas de alta gama, dizque, para hacer una
protesta pacífica, también trae a la memoria, la misma protesta pacífica que
llevaron a cabo algunos ciudadanos del sur de Cali, cuando, pistolas en mano,
también salieron a hacer patrullajes ciudadanos, para defender su derecho a no
protestar y de su propiedad privada. Las víctimas de estos patrullajes, todavía
siguen esperando por los fallos judiciales.
Imagen tomada de : La Nueva Prensa |
Los
actuales llamamientos a la auto defensa ciudadana, que hacen los voceros de la
derecha colombiana y que un reducido
grupo de sus seguidores se han apresurado a cumplir, prende todas las alarmas
de la sociedad, en torno a un regreso
oficial e impune del paramilitarismo, con el que, nuevamente se busca imponer “ (...) un “patrón criminal de apropiación de
tierras y territorios”, con el objetivo de imponer un modelo de desarrollo
rural basado en los megaproyectos, la ganadería extensiva y la agroindustria”
(CNMH, 2018)[4]
“Y
cuando las muertes ocurrieron en el marco de masacres con posteriores órdenes
de desalojo para los sobrevivientes, las personas tuvieron que huir y dejar
abandonados a sus muertos.” (CEV, 2022)[5]
[1]LOS
PARAMILITARES RESURGEN EN COLOMBIA. https://indepaz.org.co/los-paramilitares-resurgen-en-colombia/
[2]Organizaciones
sucesoras del paramilitarismo. P. 41. https://www.coljuristas.org/documentos/libros_e_informes/organizaciones_sucesoras_del_paramilitarismo.pdf
[3]Historia del paramilitarismo en
Colombia. https://www.scielo.br/j/his/a/tg74msZHyzjy6BMnmVCfjhn/?lang=es
[4] Paramilitarismo
Balance de la contribución del cnmh al esclarecimiento histórico. P. 130. https://centrodememoriahistorica.gov.co/wp-content/uploads/2020/01/PARAMILITARISMO.pdf
[5]Sufrir la guerra y rehacer la vida. IMPACTOS,
AFRONTAMIENTOS Y RESISTENCIAS. Págs. 27-28. https://www.comisiondelaverdad.co/sites/default/files/descargables/2022-07/Informe%20final%20Sufrir%20la%20guerra%20impactos.pdf
lunes, septiembre 19, 2022
domingo, septiembre 11, 2022
martes, septiembre 06, 2022
Juntos, pero no revueltos
Panorámica de CAM Santander de Quilichao. Tomada de: Radio 1040 A.M. |
Por: Omar Orlando
Tovar Troches – ottroz69@gmail.com-
Una de las
características más sobresalientes de quienes han hecho política y se han hecho
elegir por partidos, movimientos y grupos significativos de ciudadanos, que
representan la política tradicional colombiana, es su asombrosa capacidad de atribuir
a los demás, la historia, la economía o a la misma naturaleza, la responsabilidad
de sus desaciertos o de su ineptitud.
Este
comportamiento, rayano a la impudicia, que ostenta la clase política
tradicional, normalmente es exhibido cuando las circunstancias adversas, e
incluso, las críticas a sus metidas de pata o a su inacción, se salen de
control. En estos momentos de crisis, el cinismo se les sale, el oportunismo
toma el control y en lugar de apelar a una actitud humilde de reconocimiento de
los errores, la falta de tino para decidir o de la ignorancia sobre tal o cual
asunto; asumen una actitud de superioridad moral y terminan acudiendo a la auto
victimización y al ejercicio del espejo retrovisor, para endilgarle su ineficiencia
e incapacidad a administraciones pasadas, sin importarles, siquiera, que éstas
hayan sido sus aliadas o sus patrocinadoras.
Este escenario,
tristemente naturalizado por las ciudadanías necesitadas, pero, sobre todo,
desinformadas, es el que presenta la actual administración de Santander de
Quilichao, en momentos en los que, los niveles de inseguridad y de violencia
que azotan a este municipio norte caucano, han alcanzado niveles inimaginables.
Imagen tomada de: cuartodehora.com |
La ciudadanía atemorizada por el clima de violencia que ha implantado la delincuencia en todas sus formas, ha empezado a manifestar su indignación por la total ineficacia de las medidas que ha tomado la administración municipal y siente que tanto la alcaldesa, como los altos mandos militares, no están cumpliendo con su obligación constitucional de preservar la vida, honra y bienes de quienes habitan en esta zona del norte del departamento del Cauca.
Ahora bien, una vez señaladas las características de la clase política que desde hace veinte años y hasta la fecha, ha tenido la responsabilidad de lo que en la actualidad acontece en el municipio más importante del norte del Cauca, se hace necesario plantear que, no es de extrañar el tibio llamado a la unidad, que desde el despacho de la alcaldía de Santander de Quilichao, se hace a algunos sectores de la sociedad civil de esta comarca, toda vez que, como se venía señalando, este es uno de los comportamientos típicos de la clase política tradicional, cuando se encuentra impotente ante el resultado de haber transitado la acostumbrada ruta del amiguismo clientelar y de la desconexión con la realidad política y social del territorio que supuestamente “administran”.
Contrario a lo que
piensan algunos miembros de la oposición política quilichagüeña, quien estas
líneas comparte, no considera que el llamado a la unidad que hace la mandataria
local, pueda considerarse como incoherencia, todo lo contrario; tal y como se
ha venido planteando en esta columna, esta actuación hace parte de la línea
política de la derecha tradicional colombiana, que una vez abrumada por la
efectividad de su incompetencia, acude a una especie de chovinismo local,
aprovechando el desespero de la sociedad, para intentar “democratizar” su
fracaso, echando mano de iniciativas ajenas para salir del paso y ¿por qué
no?... ejecutar una maroma de re encauche, o de mimetización de su posible
sucesor (a), así sea en el cuerpo de algún aliado.
No obstante que la
confianza ciudadana hacia la mandataria municipal, se encuentre en muy malas
condiciones, lo cierto es que, la sociedad quilichagüeña debe dar el paso de
reclamar para sí, el poder constitucional que tiene (Artículo 3 de la
Constitución Política de Colombia), con el propósito de buscar salidas
consensuadas al gravísimo problema de inseguridad que padece el municipio. La
Carta Política colombiana ofrece varias alternativas de participación
ciudadana, dentro de la que está incluida la del Cabildo Abierto, o los
diferentes espacios de coadministración que ofrece la arquitectura estatal (los
consejos municipales de planeación, de juventud, entre otros espacios) ya que
el ente de control político y de coadministración dominado por los aliados de
la alcaldesa, se ha rehusado a cumplir con su obligación constitucional.
Debe quedar claro que el llamado no es para rodear a la actual alcaldesa o al Bonillo –Grijalbismo, sino al ejercicio de la búsqueda conjunta de soluciones que puedan restablecer la tranquilidad al municipio y que eviten brotes de justicia por mano propia.
Debe quedar claro que el llamado que hace este opinador, no es a rodear a la actual alcaldesa o al Bonillo –Grijalbismo en todas sus vertientes, sino al ejercicio de la participación democrática directa, a la búsqueda conjunta de soluciones, que no solo, puedan restablecer la armonía y la tranquilidad al municipio, sino que además, eviten brotes de justicia por mano propia, ocultos en convenientes nombres de grupos de seguridad ciudadana, grupos de reacción ciudadana, seguridad comunitaria, etc., ya intentados por el uribista ex secretario de gobierno de la actual administración municipal de Santander de Quilichao. La seguridad y la convivencia ciudadana no pueden quedar, como los cacareados Consejos de Seguridad, en un simple y muy utilizable llamado a la unidad, sino que debe ser un llamado a la civilidad y a la solidaridad ciudadana.
Ante crisis de
extrema gravedad, como la que atraviesa Santander de Quilichao, es necesario
estar juntos en torno a buscar soluciones, lo que no podemos permitir es una
revoltura coyuntural para tapar veinte años de lo mismo. Quilichao no puede
permitirse el lujo de seguir la misma senda. Ya fue suficiente de la
alternancia de los de siempre, así sea con sus nuevas caras, ahora en trance de
mimetismo y de ventajosa aproximación a sectores alternativos.
Juntos, pero no
revueltos.
domingo, septiembre 04, 2022
sábado, agosto 27, 2022
domingo, agosto 21, 2022
jueves, agosto 18, 2022
PENSIONADOS DEBEMOS ACEPTAR LA PROPUESTA DE GRAVAR LAS PENSIONES
Imagen tomada de: tributi.com |
Por: Carlos Julio Medina Triana
Pensionado de Telecom - Miembro de Nuestra Memoria Colectiva
En primer lugar, quiero que comprendamos, ante todo, el
espacio en el que nos estamos moviendo los pensionados.
Por un lado, de acuerdo a la información disponible,
actualmente hay reportados como pensionados, alrededor de 2.350.808 de
colombianos, mientras que los adultos mayores, es decir, personas de 60 años o
más en el país, estarían por el orden de 6.808.641.
De otro lado, según los resultados de las encuestas de
opinión, publicadas durante la campaña presidencial, está población, es decir
las personas de 60 años o más, incluidos los mismos pensionados; en su mayoría
no apostaban por el triunfo de Gustavo Petro.
Ahora bien, luego del triunfo electoral del actual
presidente de Colombia, es necesario que empecemos a observar con detalle, lo
afirmado por el actual gobierno; que propone que pagarán impuesto todos aquellos
que tengan ingresos brutos mayores a 10 millones de pesos. En el escenario así
planteado, para la discusión debemos considerar dos aspectos fundamentales.
Desde hace mucho tiempo hemos librado una fuerte lucha para
obtener un equilibrio social, basados en que, durante la existencia de nuestra
República, más de doscientos años, la oligarquía, de la mano de los
gobernantes, han construido un marco socio-jurídico, en todos los órdenes, que
los cubre de privilegios y que alimenta las diferencias sociales. Estos
privilegios han sido convertidos, artificialmente, en parte nuestra cultura, pero,
sobre todo, en una parte fundamental de las leyes que nos rigen.
Estos beneficios, elevados a la categoría de leyes de la
República, han permitido que estos funcionarios, todos con altos salarios, que incluso
sobrepasan la ley, obtengan mesadas pensiónales altas, beneficio que comparten
con gerentes y funcionarios de alto rango de la empresa privada, la banca y la
industria; mientras que la tabla salarial de los demás trabajadores colombianos,
sean estos profesionales o no, difícilmente superan los 10 SMLV (Salarios Mínimos
Legales Vigentes).
Estas situaciones nos han llevado a proponer el desmonte de
todo este tipo de privilegios, entre los que se encuentran, los exuberantes
beneficios para los congresistas y los altos funcionarios del estado, así como
el vacío legal y jurídico existente en las normas laborales y asistenciales,
que permite estas anomalías contrarias a la obligación del estado, de proteger
a los ciudadanos más vulnerables.
Ir en contra de la propuesta del gobierno de gravar las pensiones superiores a los 10 millones de pesos, es hacer defensa de la injusticia laboral y pensional que queremos acabar.
Así las cosas, al ir en contra de la propuesta del gobierno
de gravar las pensiones superiores a los 10 millones de pesos; como se planteó
en pasadas oportunidades, entramos en una enorme contradicción con nuestros
principios de equidad y, paradójicamente, entramos a hacer la defensa de la
injusticia laboral y pensional que queremos acabar.
Regresando a las cifras disponibles; si sacáramos la
diferencia entre las personas mayores de 65 años, que ya deberían tener pensión
en Colombia y quienes si la tenemos, suponiendo que todos somos mayores de 60
años, veríamos qué hay 4.457.833 colombianos adultos mayores que deberían tener
pensión y hoy no la tienen. Esta diferencia, seguramente, corresponde a los 5
millones de adultos mayores a quienes el actual gobierno propone pensionar con
medio salario mínimo. Nuestra discusión debe enfocarse en obtener la pensión digna
para todo el que tenga derecho a ella, fijando un valor tope a cargo del estado,
que podría ser del orden de los 10 SMLV y lo que pase de allí debería ser con
cargo al sector privado.
En este orden de ideas, no podemos limitar la función
legislativa del actual gobierno, pretendiendo sustentar la existencia de
normas, distintas a las constitucionales, pues esto limitaría la autonomía de
los legisladores y la discusión planteada frente a la defensa del privilegio de
exonerar las pensiones de gravamen fiscal, terminaría dándole la razón a algunos
congresistas para no reducir sus privilegios.
Al desenfocar la discusión de la histórica lucha por un
sistema pensional realmente equitativo, pero sobre todo digno, lo que se
terminaría planteando sería: quitar los privilegios de ellos, pero mantener los
de algunos pensionados, exactamente del 0,31% de los 6.808.641 colombianos que
deberían tener pensión, o del 0,89% de los 2.350.808 actuales pensionados.
Esta particular postura de oposición a la propuesta de
gravar las pensiones más elevadas, con el propósito de brindar la posibilidad
de acceso a este derecho a un gran número de colombianos que no la tienen, revela
otra cara de la misma contradicción, de la que seguro saldrán ganadores
aquellos que no apoyaron el triunfo del pacto histórico.
Por tal motivo propongo que los pensionados debemos aceptar
el gravamen propuesto por el actual gobierno, sobre la base de ingresos brutos
mayores a los 10 SMLV.
domingo, agosto 14, 2022
martes, agosto 09, 2022
LAS CARTAS QUE LE LLEGAN A LA CONVERSA
La Conversa de Fin de semana, continúa con su intención de seguir mejorando y por eso invita a quienes nos leen, nos ven y nos oyen a que se vinculen a esta "Conversa". Sus comentarios y sobre todo, sus críticas, son valiosas para nosotros. Compartimos otra comunicación de uno de nuestros visitantes.
(…) Cordial
saludo.
Para
que llegue "La paz total y el Cauca" es imprescindible que los
motivos que impiden su implementación, desaparezcan. El mayor problema del
Cauca es étnico. La Corona española a diferencia de Inglaterra, Francia,
Alemania, Holanda, Bélgica, que nunca pensaron en el mestizaje, La Corona
centró su política precisamente en ello, hasta el punto de ser Colombia un país
mayoritariamente mestizo. Solamente que esa política del más alto humanismo, se
cambió por:" España llegó a saquear, violar, destruir culturas" lo
que provoca en los indígenas puros, el sentimiento de que Negros, Blancos y
Mestizos son invasores, que deben desocupar, y en las mayorías la destrucción
de la autoestima, acomplejados de sentir que una de sus sangres es
despreciable. Creo que tiene razón el presidente Iván Duque al decir”. Ni hubo
descubrimiento, ni conquista, ni colonia. Hubo un encuentro y un
vínculo para siempre...
Los primeros pobladores de América, tienen el deber y el derecho de saber de
dónde vienen, restablecer relaciones, y aprovechar los excelentes modelos, para
ponerse al día, y dejar esa actitud de guardianes de los saberes
ancestrales, algo contra natura, en los humanos todo es perfectible. Cuando el
Cauca tenga colegios de China, Japón, Corea del Sur, Singapur, ese problema
existencial, será cosa del pasado. Con los mestizos el tratamiento es
diferente, al decirles que estar en camino del ser universal, Negro, Amarillo,
y Blanco es el destino inexorable de la humanidad.
Atte.
Luis Ayram-Quijano
lunes, agosto 01, 2022
domingo, julio 24, 2022
Respuesta de un lector
Muy agradecidos por la muy puntual y centrada
comunicación de uno de los visitantes de La Conversa de Fin de Semana, referida
a la Columna escrita y la video columna: La incorrección política de Gustavo
Bolívar (https://laconversafindesemana.blogspot.com/2022/07/la-incorreccion-politica-del-senador.html
- https://youtu.be/VV09WJIjbM0 ); contando
con la autorización de su autor; nos complace compartirla con nuestros
visitantes y seguidores:
“Estoy de acuerdo que, desde adentro del Pacto
Histórico, sobre todo los integrantes de la Colombia Humana, hagan,
constantemente, las denuncias que haya que hacer, en contra de los que
persistan en la corrupción. Pero hay dos problemas, graves, a identificar.
1) que los corruptos sean algunos de la
Colombia Humana
2) que los corruptos sean algunos
integrantes del Pacto Histórico.
Una vez advertido esto, también hay que
considerar que para la gobernabilidad del gobierno de Gustavo Petro se hizo una
gran convergencia, donde han confluido los personajes más corruptos de la
política Colombiana, para poder hacer mayorías en el congreso; pero esos
siniestros personajes NO han llegado allí porque tengan la sana intención de
sumarse al cambio propuesto; ellos llegaron ahí para recibir mermelada y, así
mismo para tratar de mantenerse vigentes en el ámbito político; pero al momento
que los poderosos económicos en el país y del extranjero también, les den la
orden, ellos votarán en contra de las reformas propuestas por el gobierno que
inicia.
Hay un dato a rescatar y; consiste en que
históricamente en Colombia, cuando ha brillado algún Líder político de
trascendencia Nacional, llámese Jorge Eliécer Gaitán, Luis Carlos Galán
Sarmiento o el mismo Gustavo Petro, no han tenido el cuidado de formar cuadros
que los reemplacen, en sus partidos políticos; casos concretos; UNIR de Gaitán,
Nuevo Liberalismo de Galán y la Colombia Humana de Petro y, por eso en ausencia
de esos Líderes Naturales esos partidos políticos desaparecen y/o no tienen
trascendencia hacia adelante. Caso especial es el Centro Demoníaco de Uribe, que,
aunque no tiene un Líder fuerte, como Uribe, sí tiene el poder y apoyo
económico para estar fuertemente representado en el Congreso y todas las
posibilidades de poner presidente del país. La oposición, para este caso la
izquierda, tampoco se ha dado cuenta que hay que trabajar en formar cuadros
políticos que se vayan posicionando en el Senado y la Cámara, para así poder
formar mayorías y, llegado el momento, como ésta sucediendo ahora, cuando se
ganó la presidencia y vicepresidencia, seamos fuertes y poder así tomar
decisiones sin necesidad de tener que ceder o hacer concesiones a los
corruptos.
Hice estos apuntes cortos y no me quise
extender, para que no se vuelva un ladrillo mi escrito.
De ustedes,
Isnel Useda Díaz”
sábado, julio 16, 2022
jueves, julio 14, 2022
lunes, julio 11, 2022
La incorrección política del senador Gustavo Bolívar
Por: Omar Orlando Tovar Troches -ottroz69@gmail.com-
Imagen tomada de : Portal CNC+ |
Una de las características más sobresalientes de una sociedad conservadora, como la colombiana, es esa especie de aversión al cambio, presente en la mayoría de sus miembros. (ver: El miedo al cambio – Proclama del Cauca y Valle) Esta metástasisiofobia, que es el nombre culto del miedo al cambio, muchas veces se manifiesta en el sabotaje, e incluso, autosabotaje a las propuestas de innovación social, planteadas e intentadas por una que otra oveja negra.
El ruido que hábilmente amplifica la mal llamada “gran prensa nacional”, alrededor de las críticas o las inconformidades, hechas públicas por un sector del Pacto Histórico, frente a la conformación de las mayorías en el Congreso de la República, los miembros del comité de empalme y hasta los nombres de quienes acompañarán a Gustavo Petro y Francia Márquez, en el gobierno nacional; es una muestra de esos intentos de sabotaje y auto sabotaje al cambio, presentes en la ciudadanía colombiana. Les invito a que vamos con despacio.
Cabalgando
a sus anchas, sobre el lomo de la insoportable corrección política, la clase
dirigente tradicional, ha sabido aprovecharse de los intentos de cambio,
liderados por algunos movimientos sociales, de odiosas manías culturales de la
humanidad como el racismo, la homofobia, la misoginia, la xenofobia y el
chovinismo; para mantener su statu quo, es decir; paradójicamente, el
conservadurismo patriarcal, fóbico y rezandero, ha refinado sus mecanismos de
control social, por medio de las reivindicaciones liberales.
Una vez
calculadas las apetitosas posibilidades políticas y sociales que brindan la
corrección política, junto con los llamados a la reconciliación y la
construcción de la Paz, hechos desde la dirección del Pacto Histórico; la clase
dirigente tradicional, a través de
algunos medios de comunicación, hábilmente ha venido manipulando la creación de
una matriz de pensamiento comunitario alrededor de ideas como la armonía, la
concordia y el consenso, para intentar acallar las voces del disenso y de la
crítica. Sigo explicando.
Ya en un
escenario de pretendido “Cambio” y de pretendidas “buenas maneras”, resulta
odioso, polarizador y hasta vandálico, levantar la voz para señalar las
deficiencias, corruptelas y delitos del régimen saliente, ahora, supuesto nuevo
amigo del Petrismo y mucho más grave, si se hace para expresar alguna
preocupación, inconformidad, descontento, crítica o rechazo en la conformación
del gobierno del cambio, sobre todo, si se tiene en cuenta que su cabeza
visible, constantemente usa simbolismos de diálogo y reconciliación.
Ante las intenciones de los de siempre, de aprovecharse del llamado a TODA la sociedad, al diálogo, el perdón y la reconciliación, lanzado por el Pacto Histórico; la incorrección política del senador Gustavo Bolívar, termina siendo un buen mecanismo de defensa de las promesas de cambio del Pacto
Este,
aparentemente confuso, panorama político, creado y amplificado por las élites político-económicas,
derrotadas electoralmente, sirve tanto para crear cortinas de humo sobre el
pillaje de los gobiernos pasados, como para esconder peligrosas maniobras de
mantenimiento de algunos mecanismos de violencia e impunidad, profundamente
enquistados en la institucionalidad estatal y privada, que pudieran ser (y
serán) usados convenientemente, a la hora de atajar peligrosos cambios del
modelo socio-económico, que puedan atentar contra las mal llamadas “Gentes de
Bien”.
Para mayor
entendimiento. El abrazo de Petro con Hernández, la conversada entre Uribe y
Petro, la foto de Lafourie y César Pachón, así como las múltiples maromas de
Barreras y Prada, para alcanzar la llamada gobernabilidad parlamentaria,
podrían ser interpretadas, mejor; son interpretadas por la clase política
tradicional, como una señal propicia, para avanzar en la reconquista de sus
feudos electorales regionales, a través de una que otra entidad descentralizada
o la manipulación del llamado del petrismo a replicar el esquema de Frente
Amplio, en los departamentos y municipios. La invitación a sabotear el cambio
desde adentro.
En la imagen algunos de los personajes que han sonado para hacer parte del gabinete de Petro |
De otro lado, los llamados a la reconciliación nacional y a la conformación del Frente Amplio Nacional, pudieran ser entendidos por un buen sector de la sociedad colombiana, como una especie de perdón social a la clase politiquera corrupta, mucho más, si como es posible que pase, la gobernabilidad de Barreras, Prada y demás estrategas llegados al Petrismo, se termine materializando en la entrega de direcciones, gerencias, consejerías y asesorías a las fuerzas del Frente Amplio, dejando en segundo plano a las fuerzas de base del Pacto Histórico, esto sin contar con, el hasta ahora, desconocido papel de la vicepresidencia en la conformación del gobierno nacional. La posibilidad del auto sabotaje por miedo al qué dirán.
Para ir finalizando.
La voz, en apariencia disonante, impertinente e incorrectamente política del
senador Gustavo Bolívar, se muestra como el puntal de una gran corriente de
opinión, a la que el suscrito se ha adherido, que considera que, en aras de
superar el miedo al cambio, es necesario seguir señalando la corrupción y el
delito de los pasados gobiernos nacionales y de algunos en lo regional y local.
Así mismo, quienes respaldamos la incorrección política del senador Bolívar,
consideramos que, efectivamente, hay que trabajar incansablemente por el
diálogo y la reconciliación nacional, pero dicho diálogo debe ir dirigido a
acabar con la violencia en los territorios y no como mecanismo de transacción
de la llamada gobernabilidad.
Corolarios:
1- * Ante
las intenciones de los de siempre, de aprovecharse del llamado a TODA la
sociedad, al diálogo, el perdón y la reconciliación, lanzado por el Pacto
Histórico; la incorrección política del senador Gustavo Bolívar, termina siendo
un buen mecanismo de defensa de las promesas de cambio del Pacto.
2- * Respecto
a la posibilidad de auto sabotaje desde el petrismo, habría que citar
nuevamente a Vicente Feliú: “...desde hoy nuestro deber es defenderte de ser
Dios.”[1].
[1] Aparte de la letra de: Una Canción necesaria de Vicente Feliú.
domingo, julio 10, 2022
domingo, julio 03, 2022
Frente Amplio Nacional, Pacto Histórico Local
Imagen tomada de perfil face book de Tercer Canal |
Por: Omar Orlando Tovar Troches -ottroz69@gmail.com-
Las
burocracias no toleran el disenso,
la
unanimidad conduce más rápidamente al estancamiento.
Warren
Bennis
En la mayoría de las fiestas, a alguien le toca el
odioso trabajo de ser quien le va bajando el volumen a la música y avisar a los
demás que la rumba se tiene que acabar, esto es; el popular Aguafiestas.
En una sociedad, como la colombiana, muy dada a los
extremismos, que es capaz de desbordarse por los éxitos individuales de tal o
cual deportista, artista o político, es bien complicado, tratar de explicar, en
medio de la borrachera del triunfo, sobre todo el político; que es necesario
tener cierta cautela a la hora de generarse grandes expectativas sobre las
posibilidades de cumplimiento de lo ofrecido por el político recién electo,
mucho más, cuando su propuesta de gobierno, reta, así sea teóricamente al
establecimiento económico y político, al que se pretendía vencer políticamente.
El reciente flujo de decisiones y acontecimientos políticos sucedidos tras el triunfo electoral del Pacto Histórico, en cabeza de Gustavo Petro, presidente electo y Francia Márquez, vicepresidenta electa, sirve de marco para explicar la decisión de asumir la posición de aguafiestas que tomamos algunos opinadores, incluso afines al proyecto político del Pacto Histórico. En primer lugar, los Aguafiestas creemos que es preciso tratar de explicarle al pueblo colombiano, todavía en medio de la sabrosura del triunfo; la necesidad de confiar en su elección, tener paciencia con algunas decisiones y no renunciar a la crítica mesurada al próximo gobierno nacional.
La necesidad de seguir “tragándose unos inmensos sapos”, con tal de despejar el camino a las grandes transformaciones políticas, económicas y sociales que requieren la gran mayoría de los colombianos.
La propuesta de CAMBIO del establecimiento político tradicional colombiano, lleno de indelicadezas éticas, morales, corrupción y hasta delincuencia, se estrelló, recién estrenada como gobierno nacional, con la triste realidad de la mala decisión que tomó una gran parte de la sociedad colombiana, en las elecciones al congreso, en las que, esa clase política tradicional sobrevivió a las intenciones de cambio, gracias al voto de muchas colombianas y colombianos, todavía presos del clientelismo, la necesidad, la manipulación y el miedo.
Frente a unas mayorías parlamentarias, en manos de los partidos tradicionales, hasta hace poquito tiempo afines y aliados a la extrema derecha uribista, las posibilidades del Pacto Histórico de sacar adelante las proyectos de ley con los cambios que se necesitan para avanzar en el dichoso Cambio, eran bien poquitas, de ahí la necesidad de seguir “tragándose unos inmensos sapos”, con tal de despejar el camino a las grandes transformaciones políticas, económicas y sociales que requieren la gran mayoría de los colombianos de izquierda, derecha e incluso los apáticos.
Imagen de Eltiempo.com |
Si bien es cierto que las maquinarias electorales,
aceitadas por el saliente presidente de Colombia, Iván Duque y un buen número
de los sobrevivientes en el congreso, ayudaron a que muchos colombianos,
siguieran eligiendo a muchos de los de siempre, también lo es, el hecho de que
en las elecciones presidenciales, la inmensa mayoría de los colombianos,
señaló, desde la primera vuelta, el rechazo a los políticos de siempre, que ya
se había visto, incluso en las elecciones parlamentarias, en algunos
departamentos de Colombia, donde las listas del Pacto y de movimientos y
partidos aliados, lograron posicionar a sus candidatos y candidatas como nuevos
congresistas.
Ya en este escenario político pos electoral, es
indispensable señalar, la permanencia de dos realidades políticas en Colombia,
la una, en el plano del gobierno nacional que va de la mano con la realidad
electoral del Congreso de la República y la otra, aquella que corresponde al
escenario local de las gobernaciones, alcaldías, asambleas, concejos y JAL, en
la que a pesar de tener relación con el congreso, especialmente con la Cámara
de Representantes; los contextos sociales y políticos, difieren bastante de los
del escenario del gobierno nacional.
Tal y como recién se señaló líneas arriba, en muchas
regiones del país, las ciudadanías expresaron su descontento y su rechazo por
los políticos tradicionales que desde hacía mucho tiempo atrás se habían
apoderado del poder político local y del manejo de los recursos públicos, en
beneficio de sus clanes, familias, grupos y clientelas; así lo demuestran los
resultados electorales que señalaron a muchos de los mismos, como nuevos
pacientes del pabellón de quemados electorales. Sin embargo, por obra y gracia
de la política de mano generosa con los perdedores y el llamado a la
reconciliación nacional, producto de los acuerdos electorales para ganar las presidenciales;
muchos de los políticos castigados por las comunidades, están a punto de salir
del pabellón de quemados.
Se entiende y hasta se acompaña la decisión de
“tragarse unos inmensos sapos” en el escenario nacional, con el noble propósito
de ir avanzando en este gobierno de transición hacia él, todavía anhelado
CAMBIO, lo que no se entiende, y por lo tanto, no se le puede explicar a las
ciudadanías que votaron por el cambio, es la razón o las razones, por las
cuales, aquellos grupos políticos locales y departamentales, a quienes la gente
decidió no seguir apoyando, tendrían que entrar a decidir el futuro político en
las alcaldías y las gobernaciones, en donde el Pacto ganó.
Dos países conviven en Colombia. El país visto y
gobernado desde Bogotá y el otro, el multicultural y pluriétnico de las
regiones. En ese sentido, muchos Aguafiestas creemos que una pizca de
coherencia, pero, sobre todo, de respeto por la decisión electoral de las
comunidades locales, debería ser parte de las consideraciones de los estrategas
asesores del Petrismo, de los congresistas del Pacto y de los partidos
aliados, a la hora de repartir vocerías, direcciones y hasta avales en las
regiones, en otras palabras, urge respetar el esquema: Frente Amplio
Nacional, Pacto Histórico Local.
sábado, julio 02, 2022
martes, junio 28, 2022
domingo, junio 26, 2022
sábado, junio 25, 2022
martes, junio 21, 2022
viernes, junio 03, 2022
viernes, mayo 27, 2022
domingo, mayo 22, 2022
jueves, mayo 12, 2022
viernes, mayo 06, 2022
SEGUIMOS APOYANDO A PETRO
sábado, abril 30, 2022
miércoles, abril 27, 2022
sábado, abril 23, 2022
lunes, abril 18, 2022
Solicitud a la CIDH de acompañamiento e intervención urgente en Colombia
Dado el actual clima de incertidumbre y tensión social y política que vive en la actualidad la sociedad colombiana, a pocos días de las elecciones presidenciales y teniendo en cuenta la importancia del documento; La Conversa de fin de Semana comparte con Ustedes, la SOLICITUD DE ACOMPAÑAMIENTO E INTERVENCIÓN URGENTE EN COLOMBIA, dirigida a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, realizada por ciudadanas (os) de diversas regiones de Colombia, agrupados en el colectivo "Nuestra Memoria Colectiva".
sábado, abril 16, 2022
jueves, abril 14, 2022
sábado, abril 09, 2022
jueves, marzo 31, 2022
domingo, marzo 27, 2022
lunes, marzo 21, 2022
CAUCA EN GUERRA
No queremos seguir sembrando más indios
Por: Nuestra Memoria Colectiva
Descargue el documento haciendo Click AQUI
sábado, marzo 19, 2022
martes, marzo 15, 2022
martes, marzo 08, 2022
Nuestra Memoria Colectiva
NO MÁS SACRIFICIOS
sábado, febrero 26, 2022
sábado, febrero 19, 2022
domingo, febrero 13, 2022
HOY Y SIEMPRE
Descargue el libro haciendo click aquí:
DESCARGAR
sábado, febrero 12, 2022
sábado, febrero 05, 2022
domingo, enero 30, 2022
La Paz y la Vida también dan votos
Foto: Portal El Pais de España |
En el acostumbrado ejercicio periodístico capitalino
de priorizar las noticias, en función de la importancia económica o farandulera
que tengan; los colombianos pudimos constatar con altas cuotas de indignación,
cómo, toda la prensa privada de Bogotá le dedicó páginas y tiempo, en primer
lugar, a la justicia espectáculo del Fiscal Barbosa, en su libreto de Sherlock
Holmes criollo, capaz de resolver en tiempo récord, el asesinato de un afamado
estilista de las estrellas de los canales de televisión y en segundo lugar; a centrar la atención de la opinión pública
nacional, alrededor de la situación de guerra en la frontera con Venezuela,
objetivo de la demagogia internacional del uribismo, pero sobre todo, de gran
interés para la industria del petróleo y del contrabando.
Preocupa que la matriz informativa de los
poderosos medios privados de comunicación, siga encasillada en el morbo
amarillista de las notas de farándula y de baranda judicial, en tanto que la
crisis humanitaria, ocasionada por el empecinamiento de la dirigencia
colombiana en hacer trizas el proceso de paz con la ex guerrilla de las FARC-EP,
sigue cobrando víctimas, ya no en términos de días, sino de horas. Las muertes
de lideres y lideresas sociales, incluidas las del niño Breiner Cucuñame y de
Albeiro Camayo , ambos guardias indígenas del pueblo Nasa, ambos protectores de
los DD.HH. y del medio ambiente en el norte
del Cauca, aún siguen esperando un mínimo de atención de estos medios de
comunicación, pero, sobre todo, de la sociedad colombiana, perdida en la matriz
mentirosa de la polarización política, gestada por el terrorismo mediático de
la derecha colombiana, que insiste en el miedo como estrategia electoral.
En este escenario de las pos verdades creadas y
gestionadas por el mercadeo político de las campañas electorales, la vida, la
paz, la verdad, la justicia y la equidad, siguen relegadas a ser asuntos
incómodos que no concitan la atención del posible elector, como sí lo hacen, el
insulto, el terrorismo electoral, el engaño, las promesas alucinantes, el baile
de Tik Tok, o asumir una superioridad moral, declarándose de centro y anti
polarizador.
El miedo a Petro, al castro chavismo, a volvernos
como Venezuela, Cuba y ahora último a Rusia (¿?), vuelven a hacer parte de la
estrategia de miedo acordada y emprendida, una vez más por el uribismo y sus
partidos aliados. A punta de inundar los noticieros, programas y páginas de
opinión de todos los portales de los medios privados de comunicación, con
señalamientos de oscuras relaciones entre grupos armados ilegales, los
vándalos, las primeras líneas de las protestas, con los partidos y movimientos
opuestos al actual gobierno nacional; una vez más, la derecha colombiana y sus
patrocinadores, intentan convencer al muy desinformado elector promedio, de la
necesidad de elegir congresistas y presidente de mano firme y corazón grande,
así no se llamen Álvaro Uribe, lo importante es que se ataje a Petro o a quien
lo represente o se le parezca.
La Paz y la vida, no son los temas sobre los que giren las propuestas de los aspirantes a ser congresistas o a ser presidente y vicepresidente de Colombia, si acaso, se mencionan como parte de los llamados eslóganes de campaña, o para diferenciarse del rival de turno, si éste o ésta no lo hacen primero. Salvo las alusiones que, sobre el tema de la paz, han hecho los partidos y movimientos aglutinados en el Pacto Histórico y las del Candidato a senado Humberto de la Calle; estos temas parecen carecer de importancia en las agendas programáticas y electorales de las campañas políticas para las elecciones 2022.
Imagen Portal Proclama del Cauca
Hace algún tiempo, este servidor, junto con personas
de otras ciudades de Colombia, suscribimos el documento: Carta
abierta a todos los partidos y movimientos políticos de Colombia. HASTA QUE
AMEMOS LA VIDA. (ver: Carta
abierta a todos los partidos políticos de Colombia (proclamadelcauca.com)),
en el que le pedíamos a los aspirantes a congresistas y presidencia de
Colombia; poner en el centro de la agenda de sus campañas; los temas de la
defensa de la Vida, los territorios, el cumplimiento del Acuerdo de Paz con las
FARC-EP y la salida negociada a la actual conflictividad armada. Gracias a la
colaboración de varios medios independientes, tanto de Santander de Quilichao,
como de Bogotá, el documento pudo ser público, sin embargo; ninguno de los
movimientos, partidos o candidatos, a quienes se les hizo llegar el documento, se
tomó la delicadeza de al menos; acusar recibo del mismo, mucho menos de
considerarlo y ponerlo en sus agendas.
Quienes suscribimos el mencionado documento y creemos
que millones de colombianos más, seguimos convencidos de la necesidad de poner
la Vida y la Paz, como centro de atención del ejercicio político del próximo
gobierno nacional y de la agenda legislativa del nuevo congreso. Seguimos
creyendo que ya es tiempo de parar las masacres, el terror, la violencia, el
odio y la intolerancia, que, durante más de doscientos años, se han convertido
en el quehacer de la sociedad colombiana y sus dirigentes.
Una vez más, invito a quien lea estas líneas, a
que nos juntemos para demandar de la clase política y empresarial de Colombia,
que se pongan serios y nos ayuden a parar esta matanza, este abandono, esta
violencia, empezando por el clientelismo, el abuso del poder, la exclusión y la
delincuencia; reunidos todos en el cáncer de la corrupción.
¡ojo! Candidatas y candidatos: La Paz y la Vida
también dan votos.