LA VITRINA DE LA CONVERSA

jueves, abril 20, 2023

Diálogos con disidencias

 

En la imagen el evento público en Caquetá el pasado 16 de abril, en el que disidencias hacen anuncio de inicio de diálogos con el gobierno del Pacto Histórico. Tomada de elespectador.com

Por: JUAN DAVID GARCIA*

El pasado 16 de abril, el Estado Mayor Central (EMC) de las disidencias de las FARC, que encabeza alias “Iván Mordisco”, realizó un evento multitudinario en la Casa Roja, en el departamento del Caquetá, a la que asistieron miembros de organizaciones afro, indígenas y campesinas que tenía el propósito de anunciar la instalación oficial de la mesa de diálogos de paz con el Gobierno colombiano. Durante este evento, los cabecillas de esta disidencia comunicaron su deseo y voluntad de definir una línea de acción conjunta con el presidente Gustavo Petro y su objetivo de búsqueda de la paz entre las dos partes. 

Las disidencias comentaron en su discurso, sus diferentes intenciones respecto a la mesa de diálogos. En primera medida hicieron referencia a un acompañamiento y participación directa del pueblo afectado, puesto que, desde el punto de vista de esta disidencia de las FARC-EP, lo que se requiere es pensar en una construcción de la sociedad en la que se involucre a los diferentes grupos. En alusión a este primer punto, hay que añadir que, en el mismo evento, el EMC exteriorizó su posición de continuar la lucha, pero de un modo distinto, en donde no se contemple la movilización con armas, sino la transformación a un movimiento popular amplio. Por último, durante este acto político la vocera del EMC hizo alusión al cambio del país que se espera, haciendo referencia a un sueño colectivo de las disidencias, en el que visualizan un país que destaque por la vida digna de las personas, en lugar de los intereses. También hizo énfasis en ver crecer a las nuevas generaciones en un país sin violencia. 

Con respecto a esta presentación de las disidencias, los diferentes sectores del Congreso se pronunciaron. Por un lado, el senador Iván Cepeda apoyó los diálogos y se refirió a este evento como un avance para la paz, en el que la importancia recae en el cumplimiento de los objetivos de las dos partes y en sus deberes; tales como el cese al fuego por parte del Estado Mayor Central. Palabras parecidas pronunciaron los senadores del Pacto Histórico; Heráclito Landinez y del Partido Verde, Ariel Ávila. 

Es un punto de inicio para un cambio; una muestra de que en Colombia se puede traer paz a las nuevas generaciones.

Por los lados de la oposición se manifestó el senador del Centro Democrático, Ciro Ramírez, quien atacó directamente al presidente Gustavo Petro y a las disidencias. Ramírez, hizo alusión a la poca capacidad y voluntad de sometimiento que tiene el presidente en cuanto a las guerrillas, puesto que, este senador de la oposición considera que estos grupos solo generan violencia, tal como lo han demostrado en los últimos meses. Otra integrante del partido Centro Democrático que se pronunció fue la senadora María Fernanda Cabal, quien hizo mención de este acuerdo con el EMC como un proceso de destrucción, muerte y desplazamiento. Los dos senadores hicieron énfasis en la historia de Colombia, la cual, desde el punto de vista de esta colectividad, ha enseñado que la única forma de conciliar con estos grupos es por medio de la guerra. 

El evento público de anuncio del EMC de compromiso con los diálogos de paz, se espera que el acto político vaya acompañado de acciones concretas por parte del Gobierno y las disidencias de las FARC. Por un lado, hay que resaltar el gran paso que da el Estado Mayor Central de las disidencias en la búsqueda de la paz con el pueblo colombiano.

Es importante destacar la participación que le quieren dar a los campesinos, indígenas y personas pertenecientes a las comunidades afro, alrededor de una idea de construcción de paz que no solo mira la búsqueda de peticiones que quieren ellos, sino también, las de un pueblo que es víctima. Hasta el momento se sabe que más de 8000 personas han presentado solicitud de pertenecer a la mesa de diálogos de paz, esto es un camino de reconciliación relevante para el país. 

Ahora bien, no se pueden dejar de lado los puntos de diferencia por parte de la oposición y seguidores del Gobierno colombiano en torno a su propuesta de Paz Total. Las palabras de Cépeda y Ávila muestran una acción de relacionamiento con las disidencias, en el que el interés principal es la búsqueda de paz. Sin embargo, el comportamiento histórico que han presentado estas guerrillas en los últimos años y meses después del proceso de paz del 2016, dejan una opinión que no favorece a los diálogos de paz. Por este motivo, las sensaciones que tienen Ramírez y Cabal, parecerían como justas, puesto que en un momento ya se intentó la paz, pero estos grupos (las disidencias) desafiaron a la sociedad y se salieron de los posicionamientos que se acordaron. 

El Gobierno colombiano, en cabeza de Gustavo Petro, debe pensar muy bien los accionamientos y diálogos de paz con las disidencias. No es un tema fácil para un país que ha estado en guerra por años con diferentes grupos guerrilleros. No es sencillo cuando ya se realizó un proceso de paz que se cumplió a medias por ambas partes. Sin embargo, es un punto de inicio para un cambio; una muestra de que en Colombia se puede traer paz a las nuevas generaciones. No se puede realizar una paz que solo dependa del Gobierno y el presidente, existe una necesidad de la participación de las disidencias y de la oposición. El próximo 26 de abril es la primera reunión y se espera que se inicie una nueva etapa en la misión de la búsqueda de paz.

*Historiador de la Universidad Externado de Colombia

 

 

viernes, abril 07, 2023

Semana Santa o Turismo Salvaje.


Imágenes tomadas de: Cámara de Comercio de Buga y elnuevosigo.com
Por: CLAUDIA YOLIMA QUINTERO VARGAS*

En 50 años; la crisis del agua, el oxígeno, los rayos ultravioleta, la contaminación atmosférica, del mar y los ríos llenos de plástico serán los nuevos escenarios del turismo salvaje y de la semana santa de los católicos.


En los recuerdos de mi infancia y las historias de mis abuelas, la semana santa era realmente santa; bajo el término católico de santidad. En obediencia y fe ciega, el rebaño de católicas y católicos acudían a darle vida a un ceremonial en el que, desde el tenebroso miércoles de cenizas, se llevaban a cabo una serie de ritos en torno a la muerte y resurrección de Jesús de Nazaret, un hombre que en su época, en la Jerusalén Romana, fue visto como una amenaza para el establecimiento Judío (el sanedrín) y el imperio romano por sus ideas revolucionarias de amor y perdón, lo mismo que por impulsar una noción monoteísta en la que el poder divino reposaba en un solo Dios, personificado en el mismo Jesús; quien debería morir para que se nos perdonaran los pecados. 

Paso a paso, durante la conmemoración de la semana santa, se siguen los últimos días de la vida de este hombre sabio hasta su tortuosa muerte, un ejemplo de la injusticia que pueden producir el poder, la codicia, la envidia, la vanidad y la sevicia; propias del homo sapiens. La semana santa de mi infancia fue una semana de dolor y sufrimiento, pues en ese entonces (y aún hoy) repetían las películas de la tortura (física y psicológica y cultural), muerte y resurrección de Jesús, luego denominado como Cristo, en el marco de las liturgias en torno a esa muerte y demás ceremoniosidades como el domingo de ramos, la procesión y el día de la resurrección. 

Esta semana santa de mi infancia y la de hoy, es el retrato de esa Colombia católica, fruto del fuerte matrimonio entre el poder político nacional y la iglesia católica, romana, apostólica y mariana, que además fue elevado a la categoría de contrato social por la carta magna de 1886 y que fuera modificado por la Constitución Política de 1991; un nuevo contrato en el que, bajo el contexto de las libertades y los derechos humanos, se prescribe la libertad de fe. Como resultado de esta transformación jurídica del Estado, tenemos hoy en día, una Colombia pluri religiosa, con libertad de culto, en la que la fe católica ha entrado en crisis y ha sido cuestionada a nivel mundial y local por estar vinculada a numerosos escándalos alrededor de la pedofilia y la corrupción. 

La crisis del catolicismo (uno de los credos religiosos con mayor número de practicantes en el mundo) ocurre en el contexto de las transformaciones socioeconómicas y políticas generadas por el gemelismo monocigótico del capitalismo y la globalización, que trajo y llevó a todas partes del mundo la necesidad de vivir nuevas experiencias, ser felices y aprovechar la vida (hedonismo consumista), apartados de una vida religiosa llena de arrepentimientos, pecados, dolor, largas y aburridas horas de la vida en templos en torno a la solemnidad de santificación y alabanzas a un dios materializado en una imagen de yeso o una bella pintura rodeada de miles de velas con peticiones y agradecimientos. 

Gracias a estas transformaciones sociales, políticas, culturales y de fe; el turismo tuvo grandes desarrollos y cambios dentro de ese cóctel capitalismo – globalización, dándole paso a una nueva manera de entender la semana santa, en la que el turismo religioso se ha incorporado a las dinámicas de la industria del ocio; una actividad económica que ha traído a los paisajes colombianos miles de turistas de todas partes del mundo, para que disfruten nuestras aguas termales, desiertos, montañas, nevados, ríos, selvas, playas, lugares de interés religioso, antropológico, histórico y cultural durante intensas horas de trabajo por parte de algunas especies animales y seres humanos, a cambio del consumo entorno a la relajación y disfrute; que producen toneladas de plástico y otro tipo de desechos. 

La movilidad a nivel mundial en temporada alta del turismo, como la de la semana santa, contamina el medio ambiente, las aguas de los ríos y el mar, así como los bosques y montañas donde se practican deportes y entretenimiento con base en tecnologías motorizadas que producen ruido y CO2. La semana santa de finales del siglo XX y del siglo XXI se ha convertido en una catástrofe ambiental, en la que la fauna y la flora son explotadas de manera agresiva para poder dar una felicidad artificial al homo sapiens confusus, un ser vanidoso y enceguecido por el consumo continuo. 

Así las cosas, en 50 años; la crisis del agua, el oxígeno, los rayos ultravioleta, la contaminación atmosférica, del mar y los ríos llenos de plástico serán los nuevos escenarios del turismo salvaje y de la semana santa de los católicos. Si Dios ha creado este universo y Jesús nos enseña amar, ¿qué es lo que buscas en un templo? Si tu templo es la montaña, el río y el mar ¿porque dejas tus basuras en los templos? El planeta está muriendo, no porque esté enfermo, sino porque el homo sapiens religionis lo está matando. 

Te invito a que esta santa semana reflexiones sobre la vida y muerte del planeta tierra.

*Politóloga, Especialista en administración pública, Especialista en gestión y desarrollo territorial, Magister en derechos humanos y cultura de paz, Investigadora y Periodista

viernes, marzo 31, 2023

Hundimiento de la reforma política: ¿Existe la necesidad de adoptar un nuevo sistema político electoral?

 

En la imagen: Senador del Pacto Histórico, Roy Barreras rompe la reforma política.
Tomada de El País- Las Américas

Por: Juan David García

En los inicios de su ejercicio en la presidencia de Colombia, Gustavo Petro le apostó a promover una reforma política, con el objetivo de transformar el actual sistema electoral, de forma que se contemplara la posibilidad de una mayor democracia.

En el articulado propuesto para esta reforma se destacan puntos como la creación de listas cerradas en los diferentes partidos políticos. A manera de incentivo para alentar las llamadas listas cerradas, se propuso que los partidos y movimientos políticos que se sujetaran a este punto y manejaran sus campañas electorales alrededor de la idea de que en sus tarjetones solo apareciera al logo del partido o el de coalición, en lugar de un listado de candidatos entre los que se deberían hacer una selección; recibirían un 30% más de financiación en las campañas electorales. 

La incógnita que se genera con respecto al hundimiento de esta reforma es si los objetivos que ésta anunciaba realmente representaban un cambio en la democracia de Colombia o si, por el contrario, este proyecto de reforma pudo ser percibido como un retraso o un continuismo en la política tradicional.

Uno de los focos de atención y de debate, estuvo alrededor del punto relativo a la posible permisividad que se tendría con la llamada puerta giratoria, en la que los congresistas tendrían la posibilidad de saltar directamente a la Casa de Nariño en calidad de ministros, a esto se le añade, que existía la posibilidad que se le guardara la curul del congresista, en caso de que decidiera volver al capitolio. Sin embargo, la vocería del Gobierno desistió de este último punto al tener un fuerte altercado en el Legislativo, en el que, hasta su propio partido, el Pacto Histórico, le dio la espalda con esta arbitrariedad. 

No obstante que, en el mes de diciembre del 2022, el proyecto de reforma política se aprobó en la Cámara de Representantes con una votación arrasadora de 103 votos a favor y 13 en contra; en estos últimos meses y con unos detractores fuertes y la falta de claridad sobre los diferentes objetivos de esta reforma, está terminó hundiéndose. 

Al final, la incógnita que se genera con respecto al hundimiento de esta reforma es si los objetivos que ésta anunciaba realmente representaban un cambio en la democracia de Colombia o si, por el contrario, este proyecto de reforma pudo ser percibido como un retraso o un continuismo en la política tradicional. Si nos basamos meramente en la historia política colombiana, es necesario hacer referencia al hecho de que las listas cerradas que también fueron promovidas en el gobierno de Álvaro Uribe Vélez, en su momento, también fueron muy criticadas por quitar la posibilidad a varios candidatos; sin embargo, la reforma política presentada en esta época no se cayó gracias a que, en ese entonces, al igual que hoy día, el clientelismo estaba muy arraigado en toda la política colombiana. 

Si tomamos este punto como referencia y sumándole la propuesta de la adición prometida de un 30% de mayor financiación a los partidos con listas cerradas, claramente vemos que este reciente proyecto de reforma política significaba un retroceso en la política democrática que se busca en Colombia. De igual manera, también es claro que uno de los puntos relevantes, que puedo ir en contra de la propuesta de estas listas, fue la falta de claridad frente a la entrada de las minorías al Congreso, puesto que, aunque en las listas cerradas del Pacto Histórico se le dio apoyó a la inclusión de género y raza, dándole una mayor paridad, tal ejercicio no se podría esperar en los otros partidos.

Lo mismo ocurrió con las preferencias que se querían otorgar a algunos congresistas, un hecho que a los ojos de la opinión pública se percibió como que el Gobierno favorece a su partido político y a sus allegados, en contravía de los reclamos de los colombianos, que mayoritariamente buscamos que en los puestos del ejecutivo (ministerios, entidades descentralizadas, la carrera diplomática, etc.) estén las personas más capacitadas. No queremos que se siga perpetuando el clientelismo.

En atención a lo anterior, es posible afirmar que el presidente Petro tiene la necesidad de reformar la política en Colombia. Se esperaría entonces que en los próximos días o meses se presente un proyecto de reforma que satisfaga no solo a los políticos sino también al pueblo colombiano.