LA VITRINA DE LA CONVERSA

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martes, diciembre 19, 2023

TransMilenio vence el temor a una condena por falsedad y fraude procesal*

 

Por: Germán Navas Talero y Pablo Ceballos Navas

Editor: Francisco Cristancho R.

La mejor dieta no es la parlamentaria sino la de la mesura.

Estuvimos preguntando a algunos conocidos boyacenses qué saben de los Ramírez: nos dijeron que son conservadores, lo cual es problema de ellos; que siempre han hecho plata con la política y que el papá se alió con alias “Mi Sangre” y “El Doctor” –connotados delincuentes, el uno paramilitar y el otro narco– y puso a disposición de estos su curul y su tiempo, como quedó acreditado con las horas de conversaciones que interceptó la Fiscalía entre el congresista y sus patrones

La obsesión de los alcaldes de Bogotá por el TransMilenio es rayana en un trastorno clínico: incluso antes de posesionarse, el alcalde electo ocupa sus primeras reuniones en garantizar la pervivencia del modelo económico del sistema, cuyo fracaso se ha probado y demostrado. Una de las primeras decisiones que deberá tomar Carlos Fernando Galán a su llegada al Palacio Liévano es si incrementa o no la tarifa del sistema de transporte. Los enterados especulan sobre un aumento entre el diez y el veinte por ciento, llevando el valor del boleto a alrededor de 3.200 pesos. Al margen de la discusión sobre su conveniencia y oportunidad, es preciso recordar que el ciudadano no paga la tarifa completa de su viaje pues este es subsidiado en porción importante con recursos públicos del orden de los 2.7 billones de pesos en la última vigencia fiscal. Y, aun así, prácticamente sostenido con el dinero de los contribuyentes, el modelo concesionado no logra llegar a números verdes. Los bogotanos recordarán que tan solo hace unos meses los operadores y su gerente (también pagado con recursos públicos) amenazaron con el cese de operaciones si el gobierno nacional no entregaba aún más plata para cubrir el que ellos llaman “déficit” y que, aunque semánticamente parecidos, realmente se debe a un defecto muy conveniente para ellos en la estructuración del negocio.

Hemos sabido que ante un juzgado municipal de Bogotá se adelanta una actuación penal en contra de funcionarios del Instituto de Desarrollo Urbano y de Catastro Distrital con ocasión de una acusación promovida por la Fiscalía por los delitos de falsedad ideológica en documento público y fraude procesal, cometidos durante la fiebre de la alcaldesa por la expropiación de bienes privados para la construcción de troncales de TransMilenio. Vemos con satisfacción que las protestas ciudadanas y los reclamos por las constantes intimidaciones y abusos de la administración distrital han sido atendidas por el ente acusador y están siendo dirimidas en una corte de derecho. Sin desmedro de lo anterior, hemos de advertir que incluso con causa penal a bordo los que siempre ganan siguen ganando: si se expropia y se derrumba lo suficiente antes de perder el poder, quien ha de sucederlo(a) no tiene alternativa distinta a seguir el curso de su predecesor(a) o de lo contrario se expone al detrimento patrimonial del Estado. Lo cierto es que cualquier bogotano debe preocuparse cuando vea a un funcionario distrital siquiera avistando su domicilio a la distancia, pues si tienen en mente pasar buses por encima de su casa o edificio no habrá tuitiva que valga. Dicho de otra forma, puesto el ojo, ordenada la expropiación.

–Pasando a otro tema– Estos son buenos días para la administración de justicia: la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia no se deja entretener en novenas ni baja la marcha en la víspera de la vacancia y por ello actuó sin demora ante la presencia de indicios graves de ideación, organización y dirección de un “entramado criminal” por cuenta del senador del Centro Democrático, Ciro Alejandro Ramírez. Si Ciro leyera esto hoy, lo haría desde una celda de la cárcel La Picota, establecimiento en el que estará recluido por un buen tiempo durante el cual el país se tendrá que privar de sus excelsos análisis económicos por los que algunos lo tenían como uno de los ‘buenos’ de la bancada uribista. Por lo visto Ciro Alejandro no solo lleva el apellido de su papá sino también su inri en materia penal. Estuvimos preguntando a algunos conocidos boyacenses qué saben de los Ramírez: nos dijeron que son conservadores, lo cual es problema de ellos; que siempre han hecho plata con la política y que el papá se alió con alias “Mi Sangre” y “El Doctor” –connotados delincuentes, el uno paramilitar y el otro narco– y puso a disposición de estos su curul y su tiempo, como quedó acreditado con las horas de conversaciones que interceptó la Fiscalía entre el congresista y sus patrones, a quienes habría convencido de ser “la puerta de entrada al Congreso”.

Los que han estado pendientes de la reforma laboral están contentos de que el recargo nocturno vuelve al comienzo de la noche mientras avanza el trámite de los demás artículos en el Congreso. Aunque haya asalariados que denostan del proyecto, que no es otra cosa que restituir los derechos globalmente reconocidos a los trabajadores y que en Colombia fueron cesados bajo la promesa de más y mejor empleo que jamás se hizo realidad, no son pocos los ciudadanos que celebraron este triunfo en el debate sobre la reforma.

En otra oportuna decisión de la justicia, esta semana un juez de la República condenó a cuarenta años de prisión al policía que torturó y asesinó a Javier Ordóñez en un grotesco caso de abuso policial que encendió las calles por haber quedado registrado en video. Esperamos que con la misma eficacia y seriedad sean decididas las causas abiertas con ocasión de los excesos en el uso de la fuerza que siguieron a la publicación del video de la tortura a Ordóñez y que concluyeron en al menos once homicidios extrajudiciales.

Adenda: los que están de plácemes con la llegada del nuevo año son los gastroenterólogos y los nutricionistas que atenderán los excesos de diciembre. A todos nuestros lectores les deseamos una feliz Navidad.

Adenda dos: un internauta nos recuerda este titular del 25 de febrero de 2023 publicado en Infobae: “Claudia López sería investigada por gastar un billón de pesos en publicidad”. ¿Qué será de eso? Averiguaremos.

Texto publicado originalmente en https://sonoticias0.wordpress.com/ y compartido con la comunidad de La Conversa de Fin de Semana gracias a la generosidad de nuestro aliado, el periodista Hernán Riaño, director de Sonoticias

Las opiniones de los columnistas son de su exclusiva responsabilidad.  Les invitamos a leer, comentar, compartir y a debatir con respeto.

 

miércoles, noviembre 08, 2023

EL FISCAL LANZA SU ARPON HACIA LA RAYA* - Columna de opinión


Editor: Francisco Cristancho R.

Y, sí. Puedo asegurar que Gustavo Petro es adicto… ¡pero adicto al trabajo! Me sorprendió por ello la reciente ‘carta’ de la periodista María Jimena Duzán. Un bodrio de esos podría venir de cualquier Dávila o cualquier Vélez, pero no de quien provino

Cuando la sociedad se acostumbra al fraude no puede decirse que impera la ley.

Si algo ha quedado demostrado tras los comicios del 29 de octubre es que hay quienes no respetan la voluntad popular. Así como la alcaldesa Claudia López afirma que la elección fue indicativa del respaldo ciudadano al metro elevado, si fuera consecuente en su razonamiento tendría que admitir que el tal ‘Corredor Verde’ fue derrotado en las urnas. De los rostros que aparecían en el tarjetón solo un candidato respaldaba el esperpento de Peñalosa y Claudia, y tal fue vencido en democracia. La alcaldesa sostiene que el voto en favor del metro se dio en proporción 82/18, siendo este último el porcentaje de votación de Gustavo Bolívar, pero no advierte que lo mismo puede decirse del voto en contra del Transmilenio por la carrera séptima, en proporción 80/20.

No obstante lo anterior, en uno de sus acostumbrados arrebatos autoritarios la burgomaestre decidió atacar la orden del juez de acción popular y, en asocio con los proponentes del ‘Corredor Verde’, presentó una tutela con el propósito de mantener el proyecto en firme. La señora alcaldesa, olvidadiza por estos días, pasa por alto que la decisión del juez en sede de acción popular se debió justamente a un compromiso adquirido por ella y consignado en el artículo 105 del Plan Distrital de Desarrollo, a cuyo tenor “[e]n ningún caso el corredor verde incluirá una troncal de transporte masivo como la que se planteó en el proyecto diseñado por el Instituto de Desarrollo Urbano durante 2017 y 2018”. Eso pasa cuando uno miente tanto y tan seguido, que pierde la cuenta. Celebramos la valiente lucha de algunos concejales y ciudadanos que han acudido a la justicia en procura de los derechos de todos, y confiamos en que prevalecerán ante esta defensa, ciertamente pobre, de la alcaldesa y sus socios.

A nosotros la justicia a veces nos genera dudas, no porque presumamos la mala fe ni porque creamos que les falta conocimiento o capacidad a los funcionarios judiciales, sino porque no hallamos razón a decisiones, como la adoptada por una fiscal en el caso que se sigue contra Cielo Gnecco Cerchar. Resulta que la Fiscalía obtuvo la autorización de un juez de la República para imponer medida de aseguramiento a la señora Gnecco, así como para ordenar su captura inmediata a efectos de ser privada de su libertad, y con todo y eso, una fiscal revocó la orden de detención y dejó a Cielo en el cielo. La decisión de la señora Nancy del Carmen Martínez fue tan abrupta y absurda que su jefe, el fiscal general, anunció que sería investigada por sus acciones. Imaginen ustedes, hasta Barbosa es consciente de la arbitrariedad manifiesta en que incurrió la fiscal. Lo cierto es que nada de esto huele a perfume.

Otra movida inexplicable de la Fiscalía involucra a su máximo responsable, el señor Francisco Barbosa. Abusando de su poder de investigación, un fiscal advirtió al director de la revista Raya que efectuaría un allanamiento con el objeto de recabar información sobre la fuente de una publicación que, dicho sea de paso, dejaba mal parado al ente investigador. En los días previos a esta comunicación, el fiscal general había calificado otra nota de la revista Raya como un intento por “injuriar, insultar [y] mancillar a una institución como la Fiscalía”, con lo que puso en la mira a este medio con el que evidentemente está malquistado.

Barbosa se dice defensor de la prensa, pero lo cierto es que no respeta el ejercicio profesional de todos los periodistas: mientras a Semana la menciona en sus intervenciones, le concede entrevistas y –según dicen– le provee de información, a la revista Raya la amenaza con allanamientos y recaudación de archivos que, olvida el que se dice uno de los mejores abogados del país, están protegidos por la reserva de la fuente y la protección constitucional al trabajo periodístico. Bien lo expresó la Corte Constitucional en Sentencia T-594 de 2017: “estamos ante un derecho fundamental que salvaguarda la facultad del comunicador de negarse a revelar, en general, todos los documentos que componen el material de sus actividades periodísticas (entrevistas, apuntes, escritos, archivos, fichas, videos, audios, etc.), sin la cual el libre ejercicio de su profesión y, más importante aún, la libertad de informar se tornarían nugatorios”. Con estas actuaciones de la Fiscalía, la revista Raya se une a Noticias Uno y a otros periodistas independientes en el grupo –a nuestro juicio, honroso– de medios malqueridos por el señor Barbosa, que casualmente reúne a los mejores comunicadores del país. Por nuestra parte celebramos el trabajo investigativo de Raya, su compromiso con el sigilo profesional y con la verdad, y manifestamos nuestro respaldo en estos tiempos de hostigamiento. Confiamos en que en esta ocasión el tunante no triunfará.

–Pasando la página– Con cada día que pasa se hace manifiesta la desesperación de la oposición con el presidente Petro. Cada vez que los gurús de la derecha predicen días malos para el gobierno, algún acierto obtiene: dicen que Biden está cansado de Petro y al día siguiente se les ve juntos a manteles, que la economía está en crisis y acto seguido se conocen las mejores cifras de empleo en años, que el dólar llegará a 5.000 pesos y ahí sigue bajando. El odio que les produce el primer presidente de izquierda los hace meter las patas a diario y ya ni pena les da.

Para terminar, nosotros sí quisiéramos una explicación, sencilla pero clara, del director de la Policía Nacional en lo atinente a las investigaciones internas por las violaciones a los derechos humanos durante las protestas de 2019 y 2021. Ya es hora de que la ciudadanía conozca si se impuso algún correctivo y si la promesa de justicia para las víctimas del abuso policial es una realidad o devino en quimera. De las personas que perdieron la vista o padecen de traumas físicos y psíquicos sabemos de su existencia, pero las responsabilidades individuales de miembros de la fuerza pública se han probado más opacas. Nuestra confianza en el director Salamanca es absoluta y por ello nos permitimos formularle esta petición.

Adenda: respecto del término “zorrilla”, que fue objeto de controversia al haber sido empleado por uno de los autores de esta columna, transcribimos un comentario del amigo y director de Cuarto de Hora, Urías Velásquez: “lo de usar la palabra ‘zorrilla’ para llamar a los tramposos [viene desde] los autores del Siglo de Oro español”. Por “zorrilla” se hace referencia a una persona tremendamente astuta, ávida de poder, viva y hábil para el engaño y la trampa. La ignorancia y el poco juicio de una masa de internautas hizo merecedor a Germán de reproches, críticas e insultos, creyendo que al usar el término “zorrilla” estaba diciendo algo que jamás pretendió. No hace daño ocupar el tiempo libre en aprender la lengua común.

Adenda del editor: Tuve la oportunidad de trabajar muy cerca de una de las campañas al Senado del hoy Presidente de la República, y sí, doy fe de que él es adicto. Desde tempranas horas del día –todos los días– estaba comunicado con sus colaboradores más cercanos para organizar la agenda, la cual terminaba a altísimas horas de la noche. (Por esa época también se le hacía tarde por estar cumpliéndole a la gente). Y, sí. Puedo asegurar que Gustavo Petro es adicto… ¡pero adicto al trabajo! Me sorprendió por ello la reciente ‘carta’ de la periodista María Jimena Duzán. Un bodrio de esos podría venir de cualquier Dávila o cualquier Vélez, pero no de quien provino, –para muchos– un referente del periodismo. Me uno al jalón de orejas por parte de la célebre María Teresa Herrán, quien “por primera vez desde hace 40 años y más” cuestionó la “no ética” de la señora Duzán. Con dicha ‘carta’, Duzán abrió un gran interrogante, no el que ella pretendía, sino el que se refiere a sus propios intereses… ¿Qué estará buscando María Jimena Duzán & Cía., con tamaña bajeza?

* Texto publicado originalmente en: https://sonoticias0.wordpress.com/ y compartido a la comunidad de La Conversa de Fin de Semana por la generosidad del periodista Otto Hernán Riaño 

Las opiniones de los columnistas son de su exclusiva responsabilidad.  Les invitamos a leer, comentar, compartir y a debatir con respeto.