LA VITRINA DE LA CONVERSA

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viernes, enero 14, 2022

IVÁN DUQUE: UN PERFECCIONISTA DEL IMPORTACULISMO


Por: Omar Orlando Tovar Troches -ottroz69@gmail.com-

Imagen tomada de: Perfil Twitter @_Gelver_

Hablar, escribir, trinar, comentar o publicar alrededor de la aparente irresponsabilidad o incompetencia del encargado, por parte de la derecha colombiana, de la presidencia de Colombia, pareciera ser un ejercicio repetitivo y por supuesto ineficaz; sin embargo, estando a pepo y cuarta de las elecciones presidenciales, imagino que no sobra la tarea de señalar que, votar por lo mismo, no solo, sería incomprensible, sino peligroso.

Aunque desde tiempo atrás, me había impuesto una especie de censura respecto al tema de la peste del Covid19, casi dos años después, tengo que retomar el asunto, para seguir señalando la desastrosa ejecutoria en el manejo de la peste, que el gobierno Duque, le impuso a mandatarios y mandatarias regionales y locales, hecho este, que por supuesto, tampoco excusa las desinteligencias que un número mayoritario de alcaldías y gobernaciones, siguen cometiendo, a la hora del manejo de la crisis sanitaria de la variante Ómicron del covicho.

Al parecer, el manejo de la pandemia en Colombia, quedó en manos de un deficiente equipo asesor de imagen, antes que un equipo serio de científicos de peso. El afán de presentarle a la maleable y desinformada opinión pública de base colombiana, algunas cifras, pero sobre todo, anuncios, que vendieran la idea, o mejor, la imagen de una buena ejecutoria del manejo de la crisis sanitaria y económica, mientras se ejecutaban planes y programas de emergencia dirigidos únicamente a unos pocos sectores amigos del gobierno nacional, especialmente, aquellos relacionados con el renglón del comercio; ha sido la impronta que tanto Duque, como su ministro de salud, le han dado a la gestión de la peste.

Como consecuencia de la política de importaculismo social y económico, orientada por los asesores de imagen con título de economistas, a quienes Duque, les ha soltado el manejo del país; las cifras de apestados por la última cepa del bicho, se dispararon de forma sustancial, no obstante que, con antelación, científicos serios de Colombia y del mundo entero, ya habían advertido sobre las consecuencias de una apertura súbita y simultánea de las actividades económicas.

Encaramados en el eslogan, que no en una seria estrategia, de reactivación económica, Iván Duque, en sus aparentes desvaríos de príncipe Caspian de Narnia y su ejercito de bestias parlantes, se han empeñado en venderle a la sociedad colombiana unos fabulosos relatos, en los que todo el mundo está vacunado, la peste ya pasó, la economía colombiana es la mejor de Latinoamérica, el desempleo sigue bajando, las infraestructuras hospitalarias y educativas son las mejores del mundo; por lo que ad portas del fin de año 2021, le dio vía libre al consumismo, el jolgorio, la parranda y el contagio masivo, a pesar de los sabios consejos de los científicos y algunos economistas serios.

Con la peste galopando por doquier, a pesar de los intentos por disfrazar los peligros del contagio y la enfermedad, afirmando que e@_Gelver_

s una gripita o el abrazo de Macta, el colombiano promedio ya no sabe qué hacer. Aunque la economía va bien; sólo que, para unos pocos, (esto es, los exportadores de minería, cocaína, café y dos o tres renglones más), el paisano de a pie, constata con tristeza y rabia, que el publicitado (costosamente) aumento del salario mínimo, no era cosa diferente a otro cuento de Narnia. El colombiano cotidiano, ahora ya siente que él también hace parte de esas horribles estadísticas de gente que ya no como tres veces al día y que, al paso que van las cosas; ya ni para dos veces, alcanza el cacareado milloncito.

Junto con el horrible panorama de constante violación de derechos humanos, con el que ahora, es mundialmente conocido el actual gobierno de Colombia, a pesar de la insistencia en la negación constante de la verdad, como política de Estado; el que dijo Uribe, sigue empecinado en convencer a Raimundo y todo el mundo, de su constante perfeccionamiento en la estolidez, la mentira y la irresponsabilidad, desviando la atención de la opinión pública hacia sus constantes y bien calculadas metidas de pata, sus gazapos e incoherencia, en tanto que prepara el camino de regreso a las épocas del terror paramilitar y la seguridad democrática, para asegurar la continuidad de la derecha en el poder por otros cuatro años más, con el pretexto de ser la única salida que el desespero colombiano puede tener.

Aprovechando la estrategia del rio revuelto, en medio de ataques terroristas y la desbordante corruptela del uribismo en el poder a lo largo y ancho del territorio colombiano,  sin querer queriendo, ha impuesto una reforma laboral a la medida de sus amigos empresarios,  privilegiando la economía de sus patrocinadores  y para seguir confundiendo y enturbiando las aguas de la opinión; ahora se hace el loco con el manejo de la peste, obligando a todo el mundo a seguir exponiéndose a la peste en empresas e instituciones educativas y a hacerse cargo por su propia cuenta de las consecuencias, esto es, aislándose cuando se sienta apestado, aprovechando su supuesto aislamiento para tramitar por cuenta y riesgo propio, su incapacidad.

Don Iván Duque ha perfeccionado a limites inusitados, el arte del importaculismo. Caracterizado como príncipe Caspian de Narnia-Colombia-Encanto, hace todo lo habido y por haber, para venderse como un incompetente, un incapaz o un mal asesorado, cuando en el fondo, ha perfeccionado las artes del engaño y de la obediencia, ahora que, en apariencia el viejo Aslan del Ubérrimo, pareciera sufrir, muy convenientemente, ataques de senilidad, intentando decidir ¿Quién será el próximo perfeccionista al que Uribe le dé su rugido de bendición?

martes, marzo 23, 2021

OJO CON LA TERCERA OLEADA DE LA PESTE

OJO CON LA TERCERA OLEADA DE LA PESTE

Imagen: Fundspeople
Por: Omar Orlando Tovar Toches -ottroz69@gmail.com-

Sin dejar de lado las, ya abundantes y generalizadas, críticas al muy deficiente manejo que el gobierno nacional, en manos del uribismo, le ha dado a la crisis sanitaria ocasionada por la peste del Covid19, es urgente alertar a la comunidad, sobre el muy serio riesgo de una tercera oleada de contagios y de decesos ocasionados por el Sarscov2 o Covid19, que llaman, y que pondría en serios aprietos al, aún enclenque, sistema hospitalario con el que cuentan los colombianos.

Colombia actualmente se ubica entre los primeros 20 puestos a nivel mundial, de contagios y muertes ocasionadas por el Covid19, debido a las medidas que han asumido los titulares de los cargos de Presidencia de la República y Ministerio de Salud de Colombia, en cuanto al manejo de la pandemia, las cuales, distan mucho de haber sido las más eficientes, no obstante que sus anuncios al respecto, hayan recibido uno que otro elogio de académicos y comunicadores afines.

La tardanza en tomar decisiones de cierres de fronteras, la aplicación de pruebas diagnósticas, la falta de apoyos económicos reales para que la ciudadanía más pobre no tuviera que exponerse al contagio y una apresurada re apertura de la actividad económica, así como el oscuro manejo de la muy improvisada adquisición de las vacunas, han puesto a la sociedad colombiana, en su conjunto, en un estado de vulnerabilidad aterrador frente a la peste.

Foto: Semana.com
A pesar de que el ciudadano colombiano del común, está más o menos informado de las aterradoras cifras de apestados y finados que el virus de marras está cobrando nuevamente, en lo que los expertos han llamado la tercera ola o tercer pico de contagio, parece ser que una especie de irresponsable desinterés por la vida propia y la de los demás, hubiera reemplazado a la sindéresis, el buen juicio o a la cordura que debería asumir la mayoría de colombianos, frente a este mortal riesgo, aún latente en el mundo entero, y que según reportes oficiales, ya ha obligado a muchos gobiernos a retomar medidas restrictivas de la movilidad y de las demás actividades cotidianas de sociedades, que incluso, han avanzado grandemente en sus procesos de vacunación.

Sin embargo, también es claro que, este irresponsable comportamiento de ignorar las mínimas medidas de auto cuidado y de bio seguridad, asumidas por un buen numero de paisanos y paisanas, obedece también a la inhumana presión que sobre ellos han venido ejerciendo, tanto los gobiernos nacional, como los locales, presionados a su vez, por los todopoderosos gremios de la producción, específicamente Fenalco, Cotelco, Acodres y algunas Cámaras de comercio, para que unas mayorías desesperadas, cansadas y sumidas en unas profundas crisis económicas, salgan desordenadamente a las calles y sitios de consumo, no tanto a producir, como a gastar los escasos recursos que aún tienen, empujados por la codicia de los amigos empresarios del Uribismo.

Ante una muy preocupante perspectiva de ocurrencia de una tercera ola de contagios masivos , con su secuela de fallecimientos, que cada día es más evidente en términos de cifras oficiales de la OMS, es urgente que los generadores de opinión pública, así como los demás actores sociales de Colombia, llamen la atención de los gobiernos nacional y locales, para que tomen las medidas necesarias que permitan, si no evitar el tercer pico, al menos que éste no alcance las dimensiones de los anteriores, a fin de impedir la ocurrencia de una catástrofe humanitaria. Para ello, se requiere, ahora sí, que las muy controvertidas Federaciones de Municipios y de Departamentos, le exijan al gobierno nacional, las facultades para sus asociados, de modo que puedan tomar de manera autónoma, las medidas urgentes para salvaguardar la vida de sus comunidades.

Foto: El Tiempo
De otra parte, la opinión pública de base, debe manifestarse con fuerza, para obligar al gobierno de Duque y su Ministro de Salud, a dejar de estar haciendo propaganda, pasando de los anuncios a los hechos reales, por ejemplo, cumpliendo con las medidas establecidas por la Ley Estatutaria 1761 de 2015,  que obligan al Estado a “respetar, proteger y garantizar el goce efectivo del derecho fundamental a la salud”, de manera  que su famoso Plan Nacional de Vacunación, deje de ser ese listado de buenas intenciones y pase a ser una realidad eficiente, que beneficie a toda la ciudadanía.

Es urgente que al gobierno nacional deje, así sea en este momento de gran riesgo para la vida de los colombianos, su marcado interés de ayudar a sus patrocinadores del sector privado, corrigiendo, por ejemplo, el manejo que le han dado las EPS a la peste, cuyas bases de datos son exactas para cobrar, pero incompletas y borrosas para el agendamiento de citas de vacunación y así mismo,  debe Duque y demás miembros del Uribismo, dejar de seguir intentando el involucramiento del empresariado, en la adquisición y distribución de las vacunas, hecho este que a todas luces, genera gran desconfianza en la equidad y eficiencia del también recelado;  proceso de vacunación.

Ya Chile, mucho más adelante en el proceso de vacunación, se vio obligada a decretar nuevos cierres y demás medidas restrictivas, ante la aparición del tercer pico de la peste. A estas horas, no se sabe que están esperando los mandatarios (as), locales, regionales y el nacional, para tomar fuertes medidas preventivas para evitar más muertes, teniendo en cuenta la absoluta indisciplina social que su deficiente manejo de la peste ha promovido, la proximidad de un largo feriado (semana santa) y la lejanía en el tiempo, de una masiva vacunación, que pudiera acercarnos a la tan cacareada inmunidad de rebaño.  Ojo con la tercera oleada de la peste; está muy cerca.

 

 

 

lunes, enero 25, 2021

MINISTERIO Y SECRETARIAS DE EDUCACION DECOLOMBIA PERDIERON EL AÑO

 

MINISTERIO Y SECRETARIAS DE EDUCACION DECOLOMBIA PERDIERON EL AÑO

Por: Omar Orlando Tovar Troches -ottroz69@gmail.com-

Imagen del plan gubernamental de Alternancia Escolar

Antes de la crisis sanitaria y económica ocasionada por el Covid19, el sistema educativo colombiano, ya venía mostrando señales de estar tocando el fondo de su propia crisis, así lo venían demostrando los resultados de las evaluaciones académicas en el contexto internacional, la ausencia de las universidades en el entorno investigativo nacional y mundial y las innumerables protestas de profesores, estudiantes e incluso de padres; reclamando desde acceso, hasta mejoras en la calidad de la educación.

Ministra de Educación de Colombia
Ver las lastimeras notas periodísticas de los noticieros de los poderosos canales de televisión privada colombiana, constatando por enésima ocasión, que existen cientos de miles de niños, adolescentes y jóvenes que no han podido ingresar al fantasioso mundo del gobierno de Duque, en el que nadie sabe quiénes, dizque tienen acceso a la gran red de internet de Colombia, a través de los dispositivos, que nadie sabe quién, le  entregó a la pobrecía colombiana, no es cosa diferente que, llover sobre ese mojado de miseria y exclusión en el que viven los pobres de Colombia, que hoy son muchos más; no obstante los cuentos de ficción que relata a diario, el gobierno de extremo centro de Duque.

Sin embargo, el amarillismo periodístico de los poderosos medios de comunicación con sede en Bogotá, ha servido para desenmascarar la absoluta ineficiencia, escondida tras la propaganda fantasiosa de las ministras de educación y de las TIC, en la que ni ellas, ni ninguno de los titulares de las secretarias regionales y locales, han sido capaces de emprender las mínimas acciones para tratar de incluir a los niños y jóvenes de Colombia en el fabulosos mundo de la interconexión, perifoneado en todos los medios por las ministras de marras.

Rascándose la cabeza y preocupados por la educación de los más jóvenes, padres, madres y cuidadores no entienden por qué  los titulares de las carteras nacionales y/o locales de la educación, no han hecho, ni la planificación adecuada, ni las acciones contractuales requeridas para adecuar el desbarajustado sistema educativo colombiano, para que al menos, las instituciones educativas cuenten con los mínimos de infraestructura requeridos para que los estudiantes puedan regresar a la normalidad académica.

Paso casi un año, para que, tanto min-educación, como min-tic, hubieran emprendido las tareas correspondientes para contratar y adiestrar al personal educativo extra, que se necesita para atender la llamada semi presencialidad o alternancia que llaman y que requiere más personal, para atender en muchos más horarios, a los muchachos y muchachas que tendrían que acudir en horarios especiales.

Casi un año, para que la infra estructura sanitaria y la logística estuviera lista para el mal llamado retorno a la normalidad académica o a la alternancia, tan cacareada por el uribismo por estos días. Casi un año para que la red de comunicaciones, ahora en manos privadas, alcanzara el 100% de cobertura o al menos un porcentaje de cobertura parecido al que alcanzo la desaparecida TELECOM, para interconectar a los más pobres en cada rincón subnormal de ciudades y veredas de Colombia. Nada se hizo.

Ministra de las TIC de Colombia
Ahora, ante la muy comprensible preocupación de cuidadores, madres y padres de familia, respecto al futuro inmediato de la educación de los más jóvenes, el centrista gobierno de Duque, nuevamente ha demostrado su importaculismo y su improvisación, dejando en manos de los docentes y de la opinión pública, la solución a este crucial problema de la sociedad colombiana.

Ni PCs, ni tabletas, ni celulares, ni datos, ni auxilios, nada de nada, en esas condiciones se vanagloria el uribismo; de tener tres estudiantes con el máximo puntaje del ICFES, algo que, más allá del orgullo de sus protagonistas y familias, debería llamar a la vergüenza de un gobierno, ante tan pobres resultados, que demuestran otra vez que; ministerio y secretarias de educación de Colombia, por enésima ocasión perdieron el año.

 

 

jueves, diciembre 24, 2020

POBREZA Y COVID

POBREZA Y COVID

Por: Omar Orlando Tovar Troches –ottroz69@gmail.com-

Tal y como ya nos tiene acostumbrados,  el gobierno uribista de extremo centro de don Duque y asociados, nuevamente salió con una de sus brillanteces, esta vez en boca del director del DANE, Juan Daniel Oviedo, quien haciendo alarde de extrema agudeza mental y súper poderes de análisis, manifestó respecto a las cifras de su estudio sobre la pobreza en Colombia que: “…precisamente los hogares cuyo jefe de hogar está desempleado tienen una mayor probabilidad de caer en la pobreza,…”. Monumental demostración de perspicacia, equiparable a la de quien descubrió que el agua moja.

Pero, más allá de las delicias epistémicas del gobierno del malabarista balompédico,  diestro guitarrista, narrador de cuentos de unicornios y enanos naranjas y mejor amigo del tal Maluma, lo que realmente llama la atención es la confirmación oficial del aterrador estado de pobreza y de inequidad, en la que está sumida la población colombiana, incluso con la colaboración del que dijo Uribe, ahora graduado de presentador de magacines televisivos.

Aterra comprobar, que las cifras del DANE, enmarcadas en el rebuscado y pomposo lenguaje técnico de su director y demás tecnócratas, demuestran hechos conocidos empíricamente, tales como, aquellos en que se muestra que antes de la pandemia y ya bajo el gobierno centrista de Duque, los niveles de la que el informe llama “pobreza monetaria”, ya venían mostrando alarmantes incrementos, así como aquellos referidos a la llamada pobreza extrema o línea de miseria. El director del DANE, reconoce en su informe que por ejemplo, los nuevos debutantes en pobrecia y miseria pasaron respectivamente del 34,7% en 2018 a 35,7% en 2019; y de 8,2% a 9,6% en ese mismo periodo de tiempo.

Estos datos, salidos de la entraña del gobierno nacional, demuestran la verdad, sabida empíricamente, según la cual, más de la mitad de la población colombiana fluctúa entre la pobreza y la miseria, esto es, familias que tienen que sobrevivir con menos de 40 dólares al mes. Esta espeluznante revelación oficial contrasta y choca con las declaraciones del actual ministro de hacienda colombiano, quien sin rubor en la cara y sin remordimiento alguno, ha expresado en distintos foros que el salario mínimo  que ganan, los ahora sí privilegiados asalariados criollos, es muy alto, perla esta, solamente comparable con aquella expresada por el DANE según la cual, quien alcance a ganar $137.000 al mes ya no se considera pobre, o mejor, en términos técnicos: POBRE MONETARIO.

Y como para ponerle un poco más de suspenso y terror al delicioso informe decembrino del DANE, FEDESARROLLO, el oráculo de Delfos de Duque y sus muchachos, ha manifestado que gracias a la peste del Covid19, las estimaciones de más pobres, desposeídos y muertos de hambre en Colombia, o mejor “Pobres monetarios”, tal como los doctores los llaman, podrían incrementarse en un 44%. Un oscuro panorama, que curiosamente, también contrasta con las estimaciones de las autoridades económicas colombianas, en las que el golpe en la economía colombiana, podría ser superado rápidamente, eso sí, con la solidaridad del pueblo colombiano, renunciando a pretensiones exageradas de salario mínimo más alto y una que otra contribución fiscal de más, que haría la muy solidaria clase media colombiana.

Tal y como hasta aquí se ha relatado, ni el informe del DANE, ni mucho menos los estudios de FEDESARROLLO, apuntan a plantear soluciones diferentes para salir de la preocupante crisis económica que ya venía padeciendo la mayoría de la población colombiana, agravada con la crisis sanitaria ocasionada por la peste del Covid, diferentes a las ya intentadas y fracasadas recetas neoliberales de contracción de los salarios reales de los trabajadores y la ampliación de la base tributaria de, la ahora empobrecida, clase media colombiana, pasando, ni más faltaba, por las reducciones, excepciones y alivios fiscales para algunos sectores de la producción, particularmente, el sector financiero, el importador y en términos generales, el comercial, de los grandes almacenes de cadena.

El periodo de pos pandemia, que aún no se sabe cuándo empezara, ofrece más, mucho más de lo mismo, para una sociedad agobiada por el miedo a la peste, a la muerte, pero sobre todo a la pobreza, que sin embargo, tuvo los arrestos para gastarse más de DOCE BILLONES DE PESOS  en tres fines de semana, durante la orgía consumista de los días sin IVA, y los mal llamados black Fridays, sin contar con los datos de las compras decembrinas de último momento y que han disparado el número de apestados y fallecidos.

Aunque se va a leer rudo y hasta insensible en unas fechas de por si sensibles, los despistados colombianos empujados por la tacañería irresponsable del gobierno Duque y la propaganda de los gremios, se lanzaron, los unos al rebusque del diario en la actividad comercial y los otros a gastarse hasta lo que no tenían, para solidarizarse con el despegue de la economía nacional, aupados todos, por una fuerte campaña mediática de  presiones al gobierno de Duque para abrir la economía, por parte de COTELCO, FENALCO y otros gremios que vieron en esta época, la oportunidad de enriquecerse a costa de la confusión y el miedo a demostrar la pobreza o apestarse, en la que cayeron los despistados colombianos, encantados por los cantos de sirena de una irresponsable campaña publicitaria, que llamaba al retorno a la normalidad decembrina, en medio de una aterradora realidad de pobreza y covid.



martes, abril 21, 2020

PANDEMIA Y EXPERIMENTO SOCIAL (Parte II)


PANDEMIA Y EXPERIMENTO SOCIAL  (Parte II)


El Experimento social

Por: Omar Orlando Tovar Troches –ottroz69@gmail.com-


En la primera parte se concluía respecto a la presente crisis sanitaria y social, y en general, a todas las pestes por venir que, dependiendo de las acciones que se tomen, podríamos seguir comprobando una y otra vez y de pandemia en pandemia, la certeza de las tesis de don Thomas Robert Malthus, según las cuales, en los momentos de crisis de subsistencia, la solución se podría encontrar en las hambrunas, las guerras y las epidemias, ya que estos fenómenos disminuirían la población, sobre todo los grupos más desfavorecidos. Eso decía don Malthus.

Pero, más allá del esperado hecho de encontrar en el corto o el mediano plazo, la cura y/o la vacuna en contra de este coronavirus en particular o de constatar la capacidad de asimilación de esta nueva experiencia mundial sobre el manejo de crisis sanitarias, lo que si le está quedando claro a la inmensa mayoría de habitantes de este planeta, es que llegó el momento de enfrentar, sin tapujos, el dilema existencial consistente en decidir, si es más importante seguir insistiendo en este modo de vida, signado por la especulativa economía de mercado, la grosera acumulación de riquezas a costa de todo, o un sistema alternativo  de vida verdaderamente humano, que privilegie la armonía con la naturaleza y la verdadera solidaridad económica y social, que entre otras, terminarían siendo la misma cosa.

Casualmente, quienes apuestan por seguir indefinidamente con la economía de mercado en su versión extendida y mejorada, niegan la existencia del dilema aquí planteado, de hecho, echando mano a su inmenso aparato propagandístico, han puesto a rodar la especie, según la cual, la economía (se cuidan de decir: este modelo) es casi que un requisito sin el cual la vida no sería viable, induciendo a una inmensa mayoría de parados, rebuscadores, informales, independientes, free lancers, o como a bien tenga llamar el lector, a esa mayoritaria masa de humanos, sin trabajo estable, a afirmar que, efectivamente, sin lo uno no hay lo otro, empujándolos, sin querer, pero definitivamente queriendo, a arriesgar sus vidas, desobedeciendo las básicas reglas de auto cuidado, con tal de salir a reclamar las ayudas estatales, que esta economía no les ha podido dar.

Esta colosal masa de trabajadores independientes, informales, free lancers o rebuscadores alrededor del planeta, junto con, la hoy, incalculable pobrecia mundial, conforman el delicioso caldo de cultivo, con el que los intocables consejeros del nuevo Consenso de Washington y el Silicon Valley, han tenido a bien recomendar  y emprender el más grande y peligrosos experimento social, nunca antes visto, dada la inmensa cantidad de sujetos sometidos a esta manipulación socio-económica.

Aunque, para  ajustarse a la verdad, este experimento se ha venido llevando a cabo desde hace mucho tiempo atrás, lo cierto es que, en esta ocasión y aprovechando la oportunidad de esta tormenta perfecta (pandemia-crisis
económica), los científicos sociales al servicio de las elites económicas, ahora cuentan, no sólo con un universo impresionante de personas susceptibles y dispuestas a aceptar todas las condiciones del dichosos experimento, sino que tienen a su disposición, toda la tecnología precisa para llevarlo a cabo.

El control social, en su modelo panóptico, ahora tiene a su alcance, no sólo el consentimiento voluntario (que no requiere) de las personas sujetas al experimento, sino que cuentan con todas las maravillas de las tecnologías de las telecomunicaciones y de la sedada voluntad de la humanidad, para dejarse conectar a la red mundial a través de todos la prótesis electrónicas dispuestas para ello en el mercado, tal como se demostró en el sur este asiático, en donde, a través de la manipulación de la tecnología de BIG DATA, se efectuó y se efectúa el seguimiento y el control de toda la población durante la pandemia.
Los nuevos gurús de la economía, que son, sino los hijos de los de antes, ellos mismos, ahora pregonan y claman la necesidad de ajustes estructurales urgentes, de modo que los generadores de riqueza, para quienes ellos trabajan, tengan todas las garantías para poder seguir trasvasando la riqueza hacia el resto de la sociedad, para lo cual se requiere de la solidaridad popular y la ayuda del Estado, expresadas en medidas que permitan flexibilizar un modelo laboral y de seguridad social que, según estos gurús, casi que ha empobrecido a los grandes jugadores de la economía nacional y mundial reunidos en sus respectivos gremios.

Ajustada cómodamente al discurso oficial, ene veces repetido y amplificado por los medios de comunicación tradicionales, el cual afirma que ahora lo importante es la educación productiva y por lo tanto, lo que ahora requiere la humanidad 2.0, son individuos con las habilidades de conectarse en modo 24/7/365, la nueva masa trabajadora desregularizada, ve cómo, las medidas de flexibilización laboral y de seguridad social, impuestas en ésta y anteriores emergencias, probablemente sean las nuevas reglas del mercado laboral, en las que fácilmente, quien no acepte conectarse bajo esas condiciones, al circuito laboral mundial, estará obsoleto y sujeto a la solidaridad de sus vecinos o a un papa Estado.

Entonces, la decisión a tomar es: replantear del todo, este modelo socio económico que privilegia a los más fuertes (política, económica y militarmente hablando) y vuelve usable y prescindible al resto de la humanidad, pero que durante las crisis, tal como ahora, siempre acude en pos de la ayuda del Estado y todos sus asociados, por pobres que sean, para salvar las élites económicas dueñas del poder, en desmedro de los más desfavorecidos,  o  simplemente, seguir en el juego, haciendo click en el botón de ACEPTO los términos y condiciones de este Experimento.