LA VITRINA DE LA CONVERSA

domingo, octubre 18, 2015

25 DE OCTUBRE

25 DE OCTUBRE DE 2015

Por: Omar Orlando Tovar Troches –ottroz69@gmail.com-

Soy un Qulichagüeño seriamente preocupado por el futuro inmediato de nuestro Municipio y, al igual que Usted; también creo que ya es tiempo de cambiar la forma en que se ha hecho política y cómo se ha administrado lo público en Santander de Quilichao y en el Cauca.
Esa preocupación, ese malestar político, ese deseo de cambio; deben redundar en algo más que verter sobre el papel puntos de vista, opiniones o críticas, debe ir más allá de la ocasional tertulia en El Parque de Las Palomas Caídas, en compañía del Combo del Ayer, para arreglar municipio, departamento o país, esa molestia se debe reflejar en el accionar democrático.
Existen dos escenarios en esta democracia nuestra, para pasar del dicho al hecho; por un lado está el del ciudadano del común, sin distingo de estratificación socio-económica, etnia, preferencia sexual o género, que consiste en el acto de elegir a tal o cual candidato o candidata para los cargos de elección popular, mediante el voto, el segundo un tanto más complicado, consistente en asumir el rol de candidato o candidata a las corporaciones públicas o a las alcaldías o gobernaciones, para tratar de ganarse el favor del electorado y salir elegido; Concejal, Diputado, Alcalde o gobernador (por favor hacer caso omiso de la masculinización de las palabras). Así se ha hecho desde que nos constituimos o nos constituyeron como democracia liberal de occidente, que es el sistema de intentar gobernarnos que tenemos hoy día.
No voy a repetir en estas líneas; el sinfín de críticas, que históricamente se han hecho a nuestro sistema de participación democrática, en esta ocasión, les voy a contar que he decidido optar por la segunda vía de accionar político, es decir, la de asumir el papel de candidato y para más señas, candidato al Concejo Municipal de este terruño Qulichagüeño. Créanme que es difícil pasar de la constante critica que como elector, he venido haciendo en los distintos medios de comunicación, que a bien han tenido publicar mis divagaciones, para pasar al otro escenario, el del ejercicio proselitista, es un camino bien difícil y mucho más, cuando quienes, como el que estas líneas les escribe, optamos por avalarnos por los movimientos de izquierda o alternativos que llaman ahora. La competencia es bien desigual, en términos de acceso al electorado y ni que hablar de la financiación del ejercicio de campaña.
Sin embargo; hoy me presento ante Usted, paisana(o),  con la aspiración de llegar al CONCEJO MUNICIPAL de Santander de Quilichao, con el firme propósito de devolverle su importancia, (la del Concejo) para lograrlo, planteo estas líneas básicas de acción en esta corporación:
1-Devolverle la autoestima a la comunidad. El servidor público y mucho más el electo, se debe al pueblo, es éste quién lo manda y le delega su representación, por eso; el servidor está obligado a servirle a la comunidad, tiene que obedecerla y rendirle cuentas.
2-El Concejo tiene que ser de puertas abiertas. Los temas de vital importancia han de ser tratados de cara a las comunidades. Propongo desarrollar los CABILDOS ABIERTOS, para la toma de decisiones que afecten el Buen Vivir de la ciudadanía Quilichagüeña.
3-El Concejo Municipal No Puede ser el apéndice del(a) mandatario(a) de turno, éste se tiene que dedicar a trabajar con toda la comunidad. Como concejal estaré atento a coadyuvar con el correcto funcionamiento de la Administración Municipal, siempre para el beneficio del pueblo. Seré un implacable vigilante y defensor del manejo de lo público.
4-En el concejo apoyare la EQUIDAD de GÉNERO y La INCLUSIÓN de todas y todos; en  los espacios de decisión municipal. En el Concejo siempre tendré  en cuenta la mirada femenina y la de todos los históricamente excluidos.
Buenas intenciones ¿?, probablemente sí, pero sinceras, hechas a manera de compromiso, que no de promesas, que de esas ya todos y todas estamos cansados, las planteo, porque pienso que, quien aspira al servicio público, debe comprometerse como mínimo a ejercer las funciones que le son propias al cargo para el que se postula y es elegido. Un mínimo, claro, pero es que en ocasiones, ni siquiera ese mínimo, que es el de trabajar, cumplen algunos que se repiten una y otra vez, o aquellos que se postulan sin saber a qué o para qué, así de despistados están, y más despistados quienes los eligen.

Este 25 de Octubre, votemos bien, y escribo en primera persona del plural, porque mucho más allá de estar ahora, en el plan de candidato al Concejo de Santander de Quilichao, también soy elector, reitero votemos bien, a conciencia, con responsabilidad, para no seguir sufriendo el eterno desencanto de descubrir a los mismos con las mismas y a un grupo de elegidos que no saben ni dónde están parados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

POR FAVOR OPINE SOBRE LOS ARTICULOS o envie su comentario a : ottroz69@gmail.com